Malestar en el Real Zaragoza con las palabras de Lambán
El presidente de Aragón señaló en los actos oficiales por San Jorge que los éxitos del deporte aragonés llegan “sin tener que recurrir a inversores extranjeros a los que les importa poco el futuro del deporte aragonés”. El trasfondo de todo es la nueva Romareda.
Las palabras de Javier Lambán (PSOE) en el acto institucional del Día de Aragón elogiando los logros del Casademont Femenino –campeón de la Copa de la Reina de baloncesto- y del Club Hielo Jaca –doble campeón de Liga y Copa-, y cuestionando los intereses de los inversores extranjeros en el deporte, en una clarísima alusión al Real Zaragoza y al proyecto de construcción de la nueva Romareda han causado sorpresa y fuerte malestar entre el grupo internacional que controla la primera sociedad anónima deportiva de Aragón. El grupo que lidera Jorge Mas lamenta que el club esté siendo utilizado políticamente de cara a las elecciones autonómicas y municipales del próximo 28 de mayo.
“En Aragón existe capacidad suficiente para llegar a la élite del deporte con empresarios y con inversores plenamente aragoneses. Se está demostrando que para llegar a la élite del deporte no son necesarios inversores foráneos que en el corazón llevan cualquier cosa menos el color de los equipos a los que dicen defender”, llegó a decir Lambán en el acto principal de la festividad de San Jorge, patrón de Aragón.
El presidente aragonés ya había lanzado un mensaje similar un día antes en otro acto institucional en Huesca: “Y en cuanto al Club Hielo Jaca y sus logros se pueden hacer múltiples metáforas. Se puede llegar a la élite del deporte sin necesidad de recurrir a inversores extranjeros que no sienten en absoluto los colores de los equipos de la tierra y que les importa poco lo que pueda ocurrir con el futuro del deporte aragonés. Se podría decir que es posible estar en la élite del deporte español sin que el club en cuestión se ubique en Zaragoza, en Madrid o en Barcelona”.
El trasfondo de las palabras de Javier Lambán tiene su origen en la aprobación el pasado 29 de marzo por el Pleno del Ayuntamiento de Zaragoza, con los votos favorables de PP, Ciudadanos y VOX y la negativa de los grupos de la oposición (PSOE, Podemos y Zaragoza en Común), de la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que permite ampliar La Romareda y ceder al Real Zaragoza la explotación del nuevo estadio durante 75 años a cambio de construirlo.
Lambán ha asegurado en varias ocasiones que el PSOE no va a llevar a los tribunales el proyecto de la nueva Romareda, pero no ha dejado de criticarlo: “Azcón –alcalde de Zaragoza y rival ahora por la presidencia de Aragón- ha regalado La Romareda a un grupo inversor, ya no tiene remedio ni vuelta atrás. Nos deja absolutamente estupefactos. Demuestra que si en lo deportivo no está muy claro el proyecto, en lo económico, sí. El club tendrá un negocio absolutamente inconmensurable”.
Por su parte, el Real Zaragoza reiteró la semana pasada en un extenso comunicado su interés en construir y explotar la nueva Romareda. La sociedad anónima deportiva anunció que está estudiando los pliegos de condiciones técnicas y cláusulas económico-administrativas que regirán el concurso convocado por el Ayuntamiento de Zaragoza, con el fin de definir y presentar una oferta solvente.
El nuevo estadio costará un mínimo de 150 millones de euros, tendrá un aforo de 42.500 espectadores y se construiría por fases entre 2024 y 2029, garantizando durante ese tiempo una capacidad suficiente para minimizar las afecciones a abonados y al resto de aficionados.
Fuentes de los actuales dueños del Zaragoza señalaron a AS que su objetivo es sacar al Real Zaragoza de la Segunda División, en la que milita desde 2013, cuando el capital del club era aragonés, con un “proyecto deportivo sostenible”.
A preguntas de este diario, fuentes de la Presidencia del Gobierno de Aragón señalaron que Javier Lambán no va a hacer más declaraciones al respecto.