Los árbitros perturban al Andorra
Piqué lideró las protestas por lo vivido ante el Mirandés. Ibai Gómez se sorprendió porque “el tiempo añadido lo decide el VAR”. El club, atento ante la posible sanción.
Es cierto que el Andorra no ganó al Mirandés, pero tampoco perdió (1-1). De modo que sigue alargando su buen inicio de temporada en Segunda y de 18 puntos posibles ha sido capaz de sumar 11. Nada mal y más teniendo en cuenta que es un recién ascendido. Se ha visto, en los partidos disputados, más con el viento a favor que en contra y en el Principado impera la felicidad. Pero hay algo que les viene perturbando: los árbitros. Tras el duelo ante el Mirandés se empezó, sin duda, a alzar la voz con fuerza.
Empezando por Gerard Piqué. El colegiado de Ena Wolf recogió en el acta que recibió insultos y hubo comportamientos amenazantes por parte de Piqué y del director deportivo Jaume Nogués. El club se enfrentaría, ahora, a una dura sanción. Sin duda que hubo diferentes momentos, contra el Mirandés, que encendieron tanto a público, jugadores, cuerpo técnico y directivos tricolores. En el Principado se habla de permisividad ante las faltas cometidas por parte de los futbolistas del Mirandés, las constantes pérdidas de tiempo, complicada actitud arbitral y la escasez de tiempo añadido. Sobre ello, Ibai Gómez mostró su sorpresa: “El árbitro se equivocó absolutamente. No solo en la acción del añadido, también en otras acciones. Le pregunté por qué solo añadió cuatro minutos y la respuesta me dejó perplejo. Me dijo que el añadido lo marca el VAR”.
La plantilla del Principado, con un sabor agridulce por no poder vencer al Mirandés, también mostró su descontento. Pero fue de puertas hacia dentro. Los jugadores saben que están más expuestos a sanciones y en caso de elevar la voz en exceso pueden ser castigados. De ahí que ya más en frío, Thomas Carrique, al ser cuestionado por el arbitraje, se limitó a decir que “son decisiones del árbitro. Nosotros ahí no entramos”. Y rápidamente desvío el foco y habló de seguir trabajando porque la próxima jornada visitan al Racing de Santander.
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Lo positivo, entre tanto ruido, es que los tricolores se mantienen en puestos de playoff y tras seis jornadas de Liga únicamente han perdido un partido, contra el Eibar. El grupo trata de pasar página mientras que en el club están expectantes a la sanción que se les impondrá por los insultos e intimidaciones que recibieron los árbitros una vez finalizado el duelo ante el Mirandés.
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