Los 128 minutos de Paulo Pezzolano jugando sin delantero
El técnico del Real Valladolid volvió a prescindir de esta figura durante un pequeño intervalo ante el Andorra. Negredo, el gran ignorado.
Estadi Nacional de Andorra. Minuto 80. El cuarto árbitro levanta el cartelón. El Real Valladolid realiza otro cambio, el cuarto del partido. Mamadou Sylla es el escogido; Iván Sánchez entra en su lugar. El escenario se repite: Paulo Pezzolano ha decidido prescindir de la figura del delantero. Solamente 17 segundos después de que el mediapunta entrase, en la misma falta lejana que cometió el punta antes de irse, el Andorra empata. Lo que, casi a la fuerza, lleva a ‘recoger cable’ al técnico, que da entrada en el 85′ a Marcos André, casi sin calentar y mientras sus pupilos achican agua buscando salvar al menos un punto. Como diría aquel, el resto es historia.
Esos minutos, en los que el conjunto blanquivioleta jugó sin un ariete claro, con Kenedy haciendo como si lo fuera, no fueron los primeros de la temporada; al contrario, se han repetido en hasta seis ocasiones, por lo tanto, en algo más de la quinta parte de los 29 partidos disputados. Y aunque mayoritariamente esta situación se dio con marcadores favorables, no siempre fue así, ya que la primera se produjo en la cuarta jornada, contra el Albacete, desde el mismo inicio del partido.
A pesar de llevar dos jornadas sin marcar, y mientras Domingo Catoira cerraba el fichaje de Sylla, confirmado esa misma noche (la última del mercado veraniego), Pezzolano se dejó en el banquillo a Iván Cédric y a Marcos André, que salió en el minuto 65, después de que el cuadro vallisoletano encajara el dos a cero que campearía en el marcador al final del juego. La consecuencia más clara fue que solo hubo un disparo entre los tres palos, de Monchu... y de falta directa.
En la octava fecha, en el José Zorrilla y frente al Burgos, Marcos André abandonó el terreno de juego en el 64′, cuando el equipo vencía por dos tantos, y no dio entrada a Sylla hasta el 78′, cuando retiró a Kenedy. En consecuencia, sumó casi otro cuarto de hora en un escenario favorable. Unos días más tarde, contra el Eldense, fue un paso más allá, en el que es su planteamiento más defensivo hasta la fecha. El uruguayo retiró a Sylla en el 86′ para dar entrada a Torres y para acabar con una línea de cinco zagueros, a la que sumó otros tres perfiles defensivos como Lucas Rosa, Malsa y Juric.
Las jornadas fueron pasando, Sylla se lesionó y Pezzolano se fue desencantando con Cédric, lo que llevó a Arnu a viajar a La Cerámica con el primer plantel, escoltando a un Salazar que venía de marcar dos goles en sus dos primeros partidos. Esos dos tantos le valieron al pacense para ser titular contra el Villarreal B, pero, en el peor momento, cuando los amarillos ganaban a falta de media hora, el entrenador prescindió de esta figura. A pesar de jugar contra un filial, no se atrevió a dar entrada al palentino, al que se llevó de excursión para que viera cómo durante 29 minutos tan solo se registraba un tiro a puerta (del ‘desaparecido’ Joni Montiel).
Hasta llegar a totalizar los 128 minutos que el Real Valladolid suma sin un delantero puro en el campo, y antes de los cinco durante los que lo hizo contra el Andorra, pasó otros once así contra el Real Racing Club en Zorrilla. Después de que Boyomo fuera expulsado en el 79′, con tres a uno en el marcador, Tárrega y Kenedy entraron en el lugar de Anuar y Sylla, lo que sirvió, entonces sí, como contra el Burgos y en Elda, para mantener un resultado positivo que no se pudo repetir este pasado domingo, cuando, para más inri, Negredo volvió a quedarse sin vestirse de corto por segunda jornada consecutiva.