Las cifras de la discordia
El Mirandés arremete contra el equipo de gobierno con papeles sobre la mesa. “En la cesión de Anduva nos cobraron hasta las tasas de obra”, destaca Alfredo de Miguel.
La ‘guerra abierta’ entre Mirandés y Ayuntamiento llega a su tercer capítulo en una novela dramática que no parece tener final. El presidente Alfredo de Miguel ha salido al paso de las últimas declaraciones realizadas por la alcaldesa Aitana Hernando y el teniente de alcalde Guillermo Ubieto en junta de gobierno, en las que argumentaron que el consistorio destinará este año al club rojillo 375.100 euros en financiación directa. Un total de 293.600 por el convenio de patrocinio por lucir la marca ‘Miranda Empresas’ en las camisetas del primer y segundo equipo, 6.000 para el fútbol base, 36.000 más para el Centro de Tecnificación y 39.500 para la reposición de instalaciones.
En una nueva rueda de prensa, De Miguel ha cargado duramente contra el equipo de gobierno: “Me quedo perplejo. Hace mención a una subvención para el fútbol base y para la reposición de instalaciones deportivas que no son verdad, y si son verdad que lo demuestre. Habla de 375.100 euros y entiendo que ahí mete los 100.000 que presumiblemente nos van a dar este año, que ya la hemos dicho que no porque no vamos a pasar por ahí”.
En la cantidad facilitada desde el consistorio se incluye además el convenio de patrocinio de las camisetas. Algo que también ha querido aclarar el máximo accionista rojillo: “No es una ayuda al Mirandés. Es un patrocinio. Según tres consultoras de estudio de marca, la valoración del impacto en televisión y redes sociales alcanzaría la cantidad de 348.489 euros que es el precio medio que se contrata. Esos 160.000, que según la alcaldesa son la ayuda al Mirandés, son un contrato publicitario que tiene un retorno y unas obligaciones obvias. Vamos a dejar de confundir a la gente”.
El Ayuntamiento también añadió en su exposición la financiación indirecta que corre a su cargo: el pago del IBI y los gastos de agua y alcantarillado. De Miguel tampoco se ha mordido la lengua al respecto señalando que “sería la primera vez que un inquilino paga el IBI de un bien. A parte lo recoge el contrato que firmamos, que no se nos iba a cobrar como no puede ser de otra manera porque no sería legal. ¿A qué vienen tantas cifras? La subvención son 36.000 euros. De 375.100 a 36.000 hay una gran diferencia. Se va sumando todo a la lista de falsas verdades”.
Cesión de Anduva por 75 años
Por otro lado, el presidente de la entidad jabata se ha referido al acuerdo de la cesión de Anduva que se firmó en 2014 y se prorrogó por otros 50 años más en 2021. Un contrato que contempla que el club realizará en el estadio las obras que estime oportunas durante ese período de tiempo. “Para hacer la grada general hubo que aceptarlo. Había que hacerlo ya que, de lo contrario, no podíamos desgravar las cantidades pagadas. Se firmó con premura, por las necesidades de construcción. Pero aquí viene lo gordo que me he callado durante tantos años. En esa obra pedimos ayuda al Ayuntamiento. Se nos negó y encima se nos cobraron las tasas y los permisos de obra por un importe de 39.000 euros. Todo ello para construir una grada en un terreno municipal cuando en ese momento se estaba exonerando del pago con un 95% a todas las empresas que venían al polígono. Esto ya era para haberse marchado por la puerta el primer día”, ha criticado.
Cuestionado sobre la posibilidad de que el propio club adquiera Anduva en propiedad, Alfredo de Miguel ha sido rotundo en su respuesta: “Estaría dispuesto. Entonces sí que tú puedes desarrollar esa obra porque estaremos metiendo dinero en el activo y el patrimonio del Mirandés. Lo que no puede ser es meter toda tu tesorería en algo que no es tuyo y cualquiera haría lo mismo. Para comprarlo que nos hagan una oferta, pero casi seguro que no nos vamos a poner de acuerdo. Eso además requiere de un tiempo y nosotros no lo tenemos. Llevamos pidiendo que sean claros con las cantidades desde el mes de diciembre, pero ya en el año 2021 se aprobó la modificación del Plan General para hacer esa obra. Está todo escrito”. Para finalizar el presidente del Mirandés ha reiterado que, en estos momentos, no existe negociación alguna con el Ayuntamiento. “El disgusto ya está, el enfado ya está, el mosqueo ya está y la falta de ilusión también está”, añade.