LaLiga muestra que el Leganés no halló ‘palancas’ para fichar en enero
Entre el límite salarial de verano y el del invierno apenas hay 323.000 € de diferencia, la mayoría usados en la llegada de Portillo. Los fichajes invernales fueron fruto de las salidas.
Los datos del límite salarial que LaLiga publicó este martes, con referencias actualizadas a cierre del último mercado invernal (el día 1 de febrero acabó el plazo) dejan al Leganés con apenas un incremento de 323.000 euros con respecto a la cifra estival. La revelación del dato pone al equipo blanquiazul por encima de los 10 millones de límite salarial, pero a la vez demuestran que finalmente el club y su propiedad no halló fórmulas para ejecutar el esfuerzo prometido en la incorporación de caras nuevas.
Los fichajes que llegaron (Borja López, Darko Brasanac y Juan Cruz) fueron consecuencia, no de ninguna implementación de nuevos ingresos o la activación de alguna ‘palanca’ en el presupuesto, sino solo fruto de las salidas. Las cuatro bajas (Naim, Poveda, Lalo y Josema) fueron las que aliviaron el límite salarial, que a inicios de enero estaba casi superado, para poder permitir incorporaciones en las que también fue necesaria la ingeniería económica.
Fichajes en el aire
El mejor ejemplo fue el fichaje de Darko Brasanac. A cinco días de que se hiciera oficial la operación, el acuerdo con el futbolista era completo, pero las peticiones de Osasuna eran superiores a las que se podían satisfacer desde Madrid. El club navarro solicitó compensaciones económicas inviables. El Lega, de partida, no podía ejecutarlas
Finalmente, el Leganés consiguió un acuerdo que también convenció a los navarros: habría pago, pero solo en caso de ascenso a Primera: 400.000 euros. Pero llegar a ese acuerdo fue complejo y difícil. Hubo momentos en los que en Butarque pensaban que no se cerraría la operación. Igual pasó con Juan Cruz, fichaje en el que el interés (y predisposición al pago) de otros clubes también puso en riesgo la operación
Margen para Portillo
Según los datos de LaLiga, el límite salarial con el que el cerró el mercado invernal es de 10,196 millones de euros. Son 323.000 euros más que los 9,873 millones de euros con los que cerró el mercado estival. Pero estos datos tienen ‘truco’ y necesidad de explicación. Vaya por delante que buena parte de esos 323.000 euros de incremento se corresponden con una mejora que se usó en ese intervalo entre agosto y febrero, no en el mercado invernal, sino para el fichaje de Francisco Portillo.
El mediocampista malagueño aterrizó en Butarque en septiembre, con el mercado ya cerrado. Como jugador sin contrato, la normativa se lo permitía, pero su fichaje computaba para un límite salarial que sigue vivo durante la temporada. Esto es, se puede alterar, aunque sea durante las ventanas de traspasos cuando se hace la ‘foto fija’ de su estado al cierre de esos periodos de fichajes. En el caso de Portillo, el Leganés sí que hizo un esfuerzo notable para incorporar al jugador. Ya entonces el club sabía que, sin ‘palancas’ sólo habría fichajes si se producían salidas, porque el club se quedaba sin nada de margen.
Un esfuerzo que no se pudo ejecutar
A las puertas del mercado invernal, el Leganés prometió un esfuerzo para intentar incorporar caras nuevas. Lo hizo el presidente, Jeff Luhnow, durante la copa tradicional de Navidad con los medios. También se filtró así tras la Junta General Ordinaria de Accionistas celebrada el 21 de diciembre. Sin embargo, ese esfuerzo no se pudo ejecutar. Desde el club explican que, en parte, se debe a que no existían muchas vías abiertas para hacerlo. Fórmulas como la ampliación de capital o el uso del remanente de los fondos CVC no estaban habilitadas.
Sólo quedaba la opción de algún ingreso extra como patrocinios, ventas de activos (algo que nunca se valoró), ingresos por traspasos (algo también complicado) o una inyección económica por operaciones de terceros, como el 10% que el Leganés mantiene sobre la plusvalía que genere una venta de En-Nesyri, ahora en el Sevilla.
El coste real de plantilla es menor
Por cierto, que estos 10,196 millones de euros que aparecen en el límite salarial no son el coste real de esta plantilla. Esto es, los salarios, amortizaciones, costes de cesión o pagos por fichajes que se han hecho de plantilla inscribible y cuerpo técnico del actual primer equipo no se corresponde con esta cifra, sino que es sensiblemente menor. El resto hasta completar este tope se corresponde a otras operaciones de temporadas pasadas que el club sigue amortizando.