La sinergia es rojiblanca
Sanllehí visita cada semana las oficinas del Wanda para aprovechar el nuevo vínculo con el Atlético y conseguir una tercera cesión.
Las famosas sinergias de grupo que no han dejado de pregonar el presidente Jorge Mas y el director general Raúl Sanllehí son claramente rojiblancas. Ya han traído a préstamo al Real Zaragoza a Giuliano Simeone, el hijo menor del Cholo, y a Víctor Mollejo, pero no serán las únicas cesiones que lleguen a La Romareda desde el Atlético de Madrid.
El técnico Juan Carlos Carcedo no pierde aún la esperanza en conseguir un delantero centro que también llegue de la mano del Atlético, ya sea Sergio Camello, pese a estar prácticamente descartado por su deseo de dar el salto a Primera, donde tiene ofertas del Rayo Vallecano y del Valladolid, u otro candidato con buenos registros goleadores, que pueda ser diferencial en la categoría, porque el Zaragoza sigue necesitando un gran ‘9′, si pretende aspirar de verdad al ascenso.
Giuliano Simeone y Mollejo tenían una amplia lista de pretendientes en Segunda División, pero el club aragonés posee ahora la ventaja de contar con su nuevo vínculo con el Atlético de Madrid, a través de los consejeros Emilio Cruz y Mariano Aguilar, que tienen a su gran valedor en Miguel Ángel Gil Marín Marín, consejero delegado y máximo accionista rojiblanco y que fue pieza fundamental en la venta del Real Zaragoza al grupo inversor internacional.
No en vano, no hay semana en la que Sanllehí no se desplace a Madrid un par de días y acuda a las oficinas del Atlético para reunirse con Andrea Berta, director deportivo rojiblanco, pero también con el propio Gil Marín, para estudiar todas las posibilidades de reforzar al Zaragoza. En este sentido, uno de los objetivos secundarios del equipo aragonés, como era el delantero centro atlético Borja Garcés, jugará cedido en el Tenerife, al mantener el Zaragoza su apuesta por Sergio Camello o, en su defecto, por un ‘9′ con importantes números goleadores, que vendría también vía, o gracias, al Atlético.