La redención de Cristóbal Parralo
Hace un año, en la jornada 13ª de Primera RFEF, el Racing de Ferrol acumulaba una racha de dos puntos de 15 y estaba a ocho del líder. Se confío en Cristóbal y hoy está en puestos de playoff de ascenso a Primera.
El Racing de Ferrol es el equipo del momento en Segunda División. Su irrupción en la categoría de plata ha sido toda una sorpresa positiva para la competición con un bloque sólido de jugadores que cuenta con el sello de autor de Cristóbal Parralo. A día de hoy el equipo está en playoff y supera en la clasificación a gigantes como Espanyol, Levante, Elche o Zaragoza, entre otros. Mucho mérito para un club que hace tan solo cinco años navegaba perdido por las oscuras aguas de Tercera División.
La creencia y confianza del club en el técnico cordobés en los peores momentos fue la principal clave del éxito. Hace un año el Racing vivió un comienzo de invierno muy frío con la eliminación copera ante un Segunda RFEF y una racha de dos puntos de 15 posibles que lo situaban fuera de puestos de playoff y a una considerable ventaja de ocho puntos del líder, que en ese momento era el Córdoba en el grupo I de Primera RFEF. Las dudas comenzaron a pulular por el ambiente en Ferrol y como no sobre Cristóbal Parralo, pero desde el club se mantuvo firme el pulso, sin tomar ninguna decisión drástica con la figura del entrenador.
Cristóbal Parralo ha sido y es el principal artífice de que el Racing esté viviendo uno de los mejores momentos de su historia, sino el mejor. Afición, estilo reconocible, proyección de crecimiento como entidad con una ciudad deportiva en el horizonte, un cóctel perfecto que ayuda a que cada día que pasa el club pueda dar un paso hacia adelante. Tras los malos momentos del pasado curso la apuesta fue total por el entrenador y los frutos se han recogido con un ascenso unos meses después y el mejor Racing en Segunda del siglo tras conseguir 26 puntos en 15 jornadas.
Consolidarse en la categoría
Desde el seno del vestuario del Racing saben que Segunda es una categoría muy larga y con muchos altibajos. No quieren salirse ni un ápice de su camino para conseguir la permanencia a pesar de que en un tercio de competición ya han conseguido más de la mitad de los puntos que suelen ser necesarios para salvarse. Mirar más allá parece algo osado a estas alturas de competición, pero lo cierto es que el colchón con el descenso es mullido con 13 puntos de ventaja y la sensación de no ser inferior a ningún equipo hasta el momento da confianza y hambre al grupo para ir a por más.
Esta semana tienen por delante el partido del Burgos, un equipo que no ha conseguido cosechar ningún punto a domicilio en lo que va de temporada. El Racing de Cristóbal Parralo sigue el camino de sumar un año invicto en A Malata, no pierde desde el pasado 17 de diciembre ante el Alcorcón 1-2 y va en la búsqueda de la que sería su octava victoria de la temporada en 16 partidos. Humildad, trabajo y ambición la “fórmula Parralo” que sitúa al Racing en cotas inimaginables hasta hace muy poco.
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