La mejor medicina para Hugo
La particular historia de un seguidor blanquiverde de cinco años que no quiso perderse el triunfo de Albacete desde la cama de un hospital
El cordobesismo vivió una fiesta el pasado sábado. La victoria en Albacete (1-3) ha generado expectativas e ilusiones en la entidad blanquiverde. Una prueba de ello fue la entonación del himno del Cincuentenario en las gradas del Carlos Belmonte, de la que se hizo eco el club diciendo que había llegado hasta la ciudad.
Y, probablemente, fue así. Especialmente a una habitación del Hospital Universitario Reina Sofía. En una de ellas estaba Hugo. El pequeño, de cinco años, estaba ingresado, pero llegada la hora del partido tuvo claro que quería verlo. Y su deseo tuvo rápida respuesta por parte de su padre, Javier.
A las 16:15 se activó una tablet y, por un momento, Hugo se “olvidó” de su problema. Se convirtió en un jugador más de Ania con el deseo de ver a su equipo ganar. Porque Hugo no entiende su vida sin el Córdoba y prueba de ello es que cada domingo va de la mano de su padre a El Arcángel a ver su equipo en su asiento del fondo sur.
Puestos en contacto con Javier Montes, nos explica que “tiene cinco años y tiene cinco años como socio del club. Desde que nació”. Decía con orgullo. De ahí que resultase comprensible que no estuviera por la labor de perderse las evoluciones de un equipo que está en racha.
Sus cinco años le han dado para hacer su primera selección natural de jugadores preferidos. Hugo tiene en su particular pedestal a jugadores de su particular época de futbolista. Son los casos de Carracedo o Isma Ruiz, componentes del equipo que consiguió el ascenso a Segunda División en junio de 2024. Y a ellos ha sumado esta temporada a Frank Fomeyem, el camerunés que ha encandilado al cordobesismo en este caso.
Por todo ello, Javier quiso presumir de la muestra de cordobesismo de Hugo el pasado sábado en redes sociales. Y acompañado de una foto, cogidos de la mano, comentaba que “aquí estamos Hugo y yo sin perdernos a nuestro Córdoba. No es donde nos gustaría, pero pronto verá a sus ídolos desde su sitio en el Bahrain Víctorious Nuevo Arcángel”.
Y a ese post le salieron múltiples mensajes de apoyo y ánimo por parte de muchos seguidores blanquiverdes. Incluso, tuvo réplica durante la retransmisión de la contienda en televisión. Iker Álvarez, titular en el partido y colaborador de la alegría de Hugo, también enviaba su mensaje en redes sociales: “¡Mucho ánimo, Hugo! Espero que estos tres puntos te alegren el día. ¡Esperamos verte pronto en El Reino!”. Con ese mensaje, el portero internacional por Andorra hacía de portavoz de todos sus compañeros.
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Sin duda, una vitamina extra para Hugo. Porque antes se decía que “goles son amores” y el resultado supuso la mejor de las medicinas para el joven aficionado del Córdoba. De hecho, su deseo es el de estar el próximo domingo en el coliseo ribereño viendo las evoluciones de su equipo, que lleva seis partidos sin conocer la derrota. Y es que el fútbol tiene un poder que es capaz de curar. Al menos, a Hugo le ayudó el pasado sábado mientras veía el partido del Córdoba en Albacete en la cama de un hospital.
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