La carta del Tenerife a los Reyes Magos
En una de las noches más mágicas del año, la afición blanquiazul se encomienda al mismo regalo de Sus Majestades de Oriente: la permanencia.
Si hacemos una encuesta rápida en los aledaños del Heliodoro Rodríguez López a la hora de pedir un regalo -en clave blanquiazul- a los Reyes Magos, prácticamente todos están de acuerdo: salvar la categoría al final de temporada. Pero es que el reto que se plantea no es nada fácil. Si bien el partido de ayer sábado frente a Osasuna -derrota por 1-2- deja la sensación de ver algunos brotes verdes y de ser el comienzo de un Tenerife totalmente diferente al de la primera vuelta, las matemáticas se declaran hartamente complicadas para los intereses de los canarios: deben igualar la primera vuelta del líder -los 39 puntos de la UD Almería- para lograr la ansiada cifra de los 50 puntos que, virtualmente, te asguran la permanencia.
No obstante, para que ello se dé, no basta con el cambio de entrenador que ha acabado con Álvaro Cervera al frente de los tinerfeños en detrimento de Pepe Mel, sino mejorar la calidad de una plantilla que se antoja débil para lograr los puntos que se necesitan. Una vez logrado el ansiado cambio en el consejo de administración que alejara a José Miguel Garrido y Juan Guerrero del poder del club para que tomara el control Rayco García, los tinerfeñistas esperan con ilusión un mercado de fichajes que se antoja difícil -como todos los de enero- pero que ya ha comenzado con aparente buen pie.
A las llegadas de Edgar Badía, con muy buen rendimiento nada más aterrizar en la isla ganándose la indiscutible titularidad, y la llegada de Fabio González desde la isla vecina tras rescindir con la UD Las Palmas, habría que sumar algún que otro retoque para perfeccionar el plantel. Las prioridades de la dirección deportiva son un lateral izquierdo y un delantero, si bien barajan algunas opciones tanto en el centro de la zaga -ha habido contactos con Aridane- o el centro del campo -se ofreció Roque Mesa, sin ir más allá-. Pero, de ninguna manera, no se podrá dar de alta a jugadores sin las respectivas salidas.
Según ha adelantado la Cadena SER en la isla, tanto Álvaro Romero como Yanis Senhadji ya tendrían el destino elegido para abandonar el club. El primero de ellos despierta gran interés en la SD Ponferradina, y el segundo debe romper primero la cesión que firmaron el club canario con el Real Betis. Del mismo modo, con la llegada de Badía a la portería del Heliodoro, a la ya esperada salida de Tomeu Nadal se podría sumar la de Salvi Carrasco. El joven guardameta -recién llegado este verano- podría salir en busca de minutos y, de esa manera, facilitar al club un hueco en el margen salarial, quedando el portero del filial, Moha Ramos, como segundo cancerbero.
¿Qué más le piden los tinerfeños a los Reyes Magos de Oriente? Pues que la segunda vuelta sea un tiempo de reconciliación, donde haya unidad entre equipo, directiva y afición, con un Tenerife más férreo y que compita mejor los partidos para engancharse a una pelea por la permanencia que ahora mismo ve demasiado lejos -a doce puntos-. Todo esto pasa por un Heliodoro lleno con ganas de volver a rugir tinerfeñismo que ayude a recuperar jugadores que no han rendido al nivel esperado -Ángel, Waldo, Enric Gallego…- y que tienen calidad y liderazgo para dar un paso al frente en esta situación. En definitiva, los tinerfeños no piden más que un año completamente antagónico al ya pasado 2024: uno en el que vuelvan las victorias, vuelvan los puntos y las caras felices a las gradas del Rodríguez López; y, de esa manera, intentar salvar la categoría al final de temporada.
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