La cantera del Pucela brilla en Lezama
El Cadete B y el Infantil A participaron en una nueva jornada de convivencia con equipos del Athletic, dejando, además, unas gratas sensaciones.
Hay días que, por más largos que resulten, uno hace por atesorarlos y guardarlos en la memoria, que son especiales. Visitar un lugar tan emblemático como Lezama, cuna de jugadores que se forjan en el Athletic Club, lo es, aunque sea para jugar partidos amistosos. Las categorías inferiores del Real Valladolid lo hicieron este miércoles, en una nueva edición de su programa ‘Encuentro entre canteras’, y disfrutaron; vaya si lo hicieron. Tanto que, a la postre, poco importó haber salido de clase a las dos de la tarde, previo preceptivo madrugón típico, y acabar llegando bien entrada la noche.
Fue de esos días en los que el esfuerzo merece la pena, dado que el Cadete B y el Infantil A, los dos equipos que jugaron, dejaron una gratísima imagen en un escenario icónico y ante duros rivales como lo son siempre los ‘cachorros’ del Athletic. Algún padre decía mientras los chicos calentaban en que la anterior ocasión no les había ido muy bien, y después, sonreía, pues, a pesar de que estas jornadas no dejan de ser de convivencia y un mero test amigable, a nadie le amarga el dulce de un buen resultado, como ambos equipos consiguieron lograr.
Después de verse por debajo en el marcador y con dos goles de desventaja, la generación de 2009 remontó y venció por un rotundo dos a cinco, merced a un triplete de Mario Domínguez, un tanto de Juanda y otro de Johan, que pudieron ser más, dado que la línea alta de la defensa bilbaína y la efectiva presión blanquivioleta propiciaron más ocasiones, entre otros, de Escalada, mientras Mateo Garrido y Álvaro Gómez lideraron los duelos y el trabajo de la zaga.
Por su parte, los más pequeños se dieron un festín goleador, al cosechar un entretenidísimo empate a seis de múltiples alternativas y oportunidades en la segunda mitad, que sirvió de ánimo frente al tópico -que lo es, aunque así lo sucedía una vez más- de que en estas categorías el físico de los vascos es superior. Un ‘hat-trick’ de Miguel Redondo, el canterano más prometedor de 2010 (suele jugar con el Cadete A), un doblete de Merino y un gol de Óscar llevaron el tanteador a un empate con el que muchos bromeaban después con que era de otro deporte.
Resultados al margen, las sensaciones en la expedición vallisoletana, que acompañaron Javier Torres Gómez, coordinador de procesos de la cantera, e Iván Briones, team manager de las categorías inferiores, eran positivas, dado que esta jornada de convivencia sirvió para medir el nivel de los jóvenes talentos con el de otra cantera profesional y tan importante como es la del Athletic, una intención por la cual se naturalizó la participación de jugadores promocionados, que durante el año militan en un escalón superior, como sucede con los antes mencionados.
De esta manera, desde octubre de 2022, a través de este programa, el club busca ofrecer una alternativa competitiva a los rivales de proximidad a los que se mide en sus competiciones provinciales y regionales, intentando, a menudo fuera de la comunidad, enfrentarse a canteras profesionales y con un alto potencial. Así, recientemente los diferentes equipos de la base del Real Valladolid se han medido a sus homólogos del Athletic Club, del Real Madrid, del Real Racing Club o de Osasuna, entre otros, a los que espera dar continuidad con otros rivales como el Alavés.