La afición del Pucela se moviliza en favor del sí
El malestar de muchos abonados con el Real Valladolid salta de las redes sociales a la calle con pegatinas colocadas ya en el centro de la ciudad.
La decisión del Real Valladolid de aceptar el cambio de escudo si y solo si vota a favor de retornar al anterior la mitad más uno del censo electoral constituido, cifrado en los 21.949 abonados que tienen derecho a asiento en el estadio, ha desencadenado numerosas críticas por parte de los aficionados, a las que se añaden otros detalles de la consulta popular como la fórmula de la pregunta, que habla de un parecer y no de una preferencia, el escaso plazo otorgado o el hecho de que solo se vaya a realizar de manera telemática, rechazando la idea de acudir a las urnas.
La medida con la que el club pretendía apaciguar una polémica latente desde que, motu proprio, el equipo directivo decidió cambiar uno de los principales rasgos identitarios del club, lejos de hacerlo, ha avivado las quejas por un modus operandi que obliga a que sean necesarios casi 11.000 votos para revertir dicho cambio y retornar a un emblema con un alto poder de unión, reclamado constantemente por el sector de la afición situado en el Fondo Norte, aunque no solo, como se puede percibir a través de las redes sociales, que si bien no son un reflejo preciso al 100% de la realidad, sí son un medidor relevante. Uno que, en este caso, se ha encontrado con una gran contestación a las formas de la entidad.
Así, a través de la red social ‘X’ (antes Twitter), son muchos los abonados que llaman a la movilización e, incluso, se ofrecen a ayudar a aquellos 4.000 no registrados en el Portal del Blanquivioleta, a quienes no estén familiarizados con esta plataforma o a sus allegados para facilitarles el proceso y votar, buscando evitar la carga negativa que puede suponer el que, de base, pueda haber alrededor de un 20% de quienes tienen derecho a voto que no lo ejerciten debido a una posible brecha digital.
Asimismo, este rechazo está en la calle y no solo en forma de debate, sino también de proclamas que piden el voto para el ‘sí' que devuelva el escudo anterior, por ejemplo, a través de pegatinas que se podían ver, apenas un par de horas después de la rueda de prensa de David Espinar, en pleno centro, en la Plaza Mayor, una de las varias medidas que, probablemente, se podrán ver en estos días siguientes; quizás, menos de las que podrían darse en caso de haber contado partidarios o detractores del nuevo escudo con un plazo previo mayor para ‘hacer campaña’.
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