Kevin Medina: “El míster me dijo que llegase al segundo palo”
El malagueño realiza un generoso esfuerzo en la contienda ante el Castellón recompensado con la autoría del gol de la victoria
De Kevin Medina se conocía su magia, su capacidad para sorprender. De momento, como si fuera un perfume de los caros, lo va dosificando. Pero eso no significa que el malagueño no haya encontrado una forma de empezar a meterse a la afición del Córdoba en el bolsillo.
Anoche fue protagonista con su gol, que servía para que el equipo de Iván Ania le diera la vuelta a la contienda que le medía con el Castellón. Y lo cierto es que Kevin Medina le dio otra cosa. Porque el malagueño implementó en su juego capacidad de sacrificio y responsabilidad. Pese a jugar de extremo, no dudó en ubicarse en el lateral cuando a Juan María le estaban atendiendo de su problema en el hombro. Es decir, ofrece una versión mejorada a ese “fútbol de calle”, del que se declaró embajador el día de su presentación.
Por su factor determinante en la contienda, Kevin Medina fue el elegido por el club para hablar ante los medios de comunicación en la sala de prensa. El habilidoso jugador reconocía sentirse “muy contento por el gol, pero más contento por la victoria del equipo”.
Lo cierto es que el Córdoba no lo tuvo fácil. Y antes de encontrar la fórmula para rebatir al Castellón, tuvo que jugar contra sí mismo tras una desastrosa primera mitad. Pero Kevin Medina valoró esa capacidad de sus compañeros (y suya) para sobre ponerse: “Al final, me quedo con la reacción del equipo y cómo hemos sacado los puntos”.
Vista la reacción de la segunda mitad, fue tema de conversación y de cuestión conocer detalles del discurso de Iván Ania en el vestuario. El asturiano dijo en la sala de prensa que apeló “al orgullo y al alma”, además de algunos aspectos tácticos. Respetando ese código, Kevin Medina habló de “ajustes” y de “corregir los errores y los cambios que salieron bien”. Incluso apuntó al apartado clasificatorio recordando que con la remontada ante el Castellón “hicimos bueno el punto de Valladolid”.
Acostumbrado a firmar golazos, Kevin Medina hizo un tanto intuitivo acompañando la transición que se había iniciado en campo propio. El malagueño desvelaba que “justo antes del gol, el míster me estaba diciendo que llegase al segundo palo”, por lo que “cuando vi a Albarrán abrir, lo hice. Luego, el balón me cayó y sólo tenía que empujarla”.
Haciendo una valoración personal del partido. El extremo malagueño justificaba los esfuerzos realizados también en zona de cobertura por necesidad alegando que “estoy para ayudar al equipo jugando de lateral, de extremo o donde sea”. Aun así, no perdió la oportunidad de hacer autocrítica porque “me quedo con la espinita de haber cerrado el marcador con el tres uno”, en ese lance del minuto 91 en el que se planto solo delante de Amir, pero que cruzó en exceso con su tiro de pie izquierdo.
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Kevin Medina resumía la noche apuntando a que “todos estamos muy contentos por darle una alegría a la afición que no para de animar”, pero sin olvidar que “tenemos que seguir mejorando” para llegar con las mejores condiciones los siguientes partidos en los que se vea a un Córdoba más parecido a su estilo y a un Kevin Medina que pueda sacar más recursos de su chistera.
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