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MÁLAGA

Juanfran: “No estoy tranquilo, estoy nervioso como todos”

El lateral derecho del Málaga asume el mal momento del equipo, tira de autocrítica, algo inusual estos días en LaRosaleda, y se muestra convencido de que habrá reacción.

Juanfran Moreno, en la sala de prensa de La Rosaleda.
PACO RODRIGUEZDiarioAS

Juanfran Moreno suele hablar claro cada vez que se pone delante de un micrófono. Este lunes visitó el plató de Área Malaguista (101 TV) y abordó sin tapujos la crisis galopante que vive el Málaga. Hizo autocrítica, algo que escasea y mucho en La Rosaleda en los últimos tiempos, lanzó un mensaje de unidad y afirmó estar seguro de que habrá final feliz en esta pesadilla que vive el malaguista actualmente.

Situación crítica: “El fútbol no son siempre cosas bonitas, pero hay que respetar el escudo y lo que significa, estar en las buenas y en las malas. No falté en las buenas, no lo voy a hacer en las malas. Como si hubiera estado cualquier compañero el mensaje es el mismo. La gente lo tiene que imaginar, la situación es muy difícil, solo dos victorias en 13 partidos en una temporada en la que mentalmente este vestuario estaba ilusionado con otras cosas. Pero la frase que más he escuchado es que hoy mismo jugaríamos contra el Cartagena. Llámelo masocas o no sé cómo decirlo, pero la gente quiere resarcirse. Necesitamos una victoria que traiga aire fresco y cambie la dinámica. No es el momento de hablar, en realidad en el mundo del deporte y del fútbol vale de poco hablar, está bien la comunicación y que la gente te escuche, pero lo que cuentan son los resultados. Ni el juego. Y cada día es más resultadista todo, solo vale ganar”.

Pepe Mel: “El míster está como está la plantilla. Hacemos muchas cosas bien desde los partidos, sobre todo desde que ha llegado él pero seguimos cometiendo errores individuales. Aunque no me gusta decir individual porque cuando hay un error, habrá cuatro o cinco, porque cuando un compañero falla tiene que haber otro para ayudarle. En un deporte de equipo señalar a uno solo es injusto”.

El error de Escassi: “Cuando las cosas no salen bien, se tiene que mover un poco el equipo y buscar soluciones. Pero llevamos 13 partidos, se han buscado todo tipo de soluciones y nos hemos dado cuenta de que ese no era el problema. Cada uno tiene que mirarse y dar más, empezando por mí: mejorar centros, balance defensivo, fuera o dentro, en todo lo que uno puede mejorar. Cuando hay un gol en contra no se puede decir que fue porque Escassi perdió la pelota. Es que Manolo no dio bien el balón, es que Juanfran no cerró, ya le he dicho tres. Es que a Esteban le pasó por debajo, es que Ramón podría haber ido al segundo en lugar de mirar solo al balón, es que Javi Jiménez estaba muy alto. Cinco o seis jugadores. Sería muy injusto culpar a Escassi. En este momento necesitamos la palabra equipo por encima de todo. Juntos vamos a salir de ahí, pero desde el rendimiento individual”.

Implicación del equipo: “Tranquilo no estoy, estoy nervioso como todos los que queremos el bien del Málaga. El equipo está concienciado y trabaja para salir de ahí, pero si no ganamos, este mensaje no sirve de nada. La desesperación no sólo está fuera, también te llega dentro. Es un proyecto muy ilusionante, en el que vienes con el sueño de ascender con un Málaga Club de Fútbol, o pelear por ascender, y te ves sin ganar partidos y en una situación muy complicada. También para los hombres de negro del club como yo les llamo, los utilleros, los fisios, la gente de mantenimiento… El descenso sería un desastre para ellos. Esto te lleva a la precipitación y la desesperación. Hay que limpiar la mente y conseguir que esa desesperación se convierta en energía. El míster lo dijo muy claro: con lo que estamos haciendo no nos da, hay que hacer más”.

Rendimiento individual: “Yo la pregunta que me hago es ¿qué puede hacer Juanfran más? Esa es la pregunta que me hice a las cinco de la mañana después de haber visto el partido dos veces. ¿Qué puedo hacer más? Evitar centros con la izquierda, que yo los considero más bien balones al área, buscando una segunda jugada, un rechace o una mano estúpida de las que se pitan hoy en día; dar una asistencia; cerrar ayer y evitar el gol… Yo sé lo que puedo dar, llevo muchos años y juego siempre, será por algo. ¿Qué hago fuera? Hablar con los jóvenes, con la gente que no se ha visto en esta situación. Hablo con unos y con otros y les explico que ahora la gente está enfadada, que te van a apretar, que te van a pitar o pegar un grito. Eso es fútbol también, no es malo, la adversidad te hace sacar lo mejor de ti. Ahora es cuando más motivado estoy para jugar. La gente espera poco ahora de nosotros y es el momento de dar mucho y sacar esto adelante. No hace falta que nadie me motive ahora mismo y a muchos les pasa igual. Ahora lo que no hay que tener es miedo a jugar, a coger la pelota, a fallar. Esto es un don que nos ha dado la vida y hay que disfrutar. Vengo de una familia humilde, mi padre es albañil y trabajando ocho o diez horas, y nunca me exigió nada, solo me dijo que disfrutara y así he llegado hasta aquí”.

Mal momento: “En ningún momento, no está disfrutando nadie. El día del Lugo estábamos disfrutando y los últimos cinco minutos acabamos sufriendo. ¿Dudas? No, dudas, no. Fue una victoria contundente. Las dos veces que nos hemos adelantado hemos ganado tranquilamente. Leganés, Oviedo y Eibar no hicieron absolutamente nada, solo esperaban nuestro error, pero es que el error llegó. La solución es estar más atentos, no el que falla, el que está al lado. Hay que desconfiar, estamos en una situación en la que todo lo malo que nos pueda pasar nos va a pasar y, desde ahí, protegernos. Vamos a pecho descubierto a ganar y quizás hay que llegar al minuto 80 con 0-0. Desde el principio era un vendaval, quizás intentamos llegar demasiado rápido y lo que falta es calma, ganar desde la solidaridad y el bloque. Sí cortamos la sangría de los primeros partidos, era insostenible. Hay que desconfiar de que todo lo malo nos puede pasar”.

Lesiones: “Yo hice más horas que nunca en una pretemporada. Que físicamente el equipo está mal... A ver, hemos tenido 14-15 lesionados, evidentemente hay un problema, no todo puede ser casualidad. Seguro que hemos hecho bien algo, empezando por uno mismo. Es injusto echar la culpa a los preparadores físicos, Kike y Julio son maravillosos y ahora también ha venido Nacho. Estuvimos toda la pretemporada jugando en línea de cinco y luego pasamos a cuatro casi sin tocarla”.

Nivel en los entrenamientos: “Si se nos viera entrenar, no entenderían nada. Pero el fútbol no es cómo se entrena, es cómo se compite, cómo afrontas la adversidad. Cuando las cosas no fluyen hay que sacar lo mejor de uno mismo. Argumentos tenemos y hay buena plantilla, jugador por jugador. Al míster no se le puede decir nada, nos ha dado una forma de jugar que nos permite generar, si no lo hacemos… Yo tengo capacidad para dar un buen centro, como los mediapuntas, como los mediocentros. Individualmente, cada uno tiene que dar un paso adelante”.

Jugar a otra cosa: “Lo contrario a lo que estamos intentando es patadón arriba y segunda jugada, yo opino lo mismo y no creo que tengamos jugadores de esas características. Sería sorprendente que con jugadores del talento de Álex Gallar, Villalba, Febas, Luis, Ramón, Jozabed… te pongas a pegar pelotazos. No creo que fuera la solución. Te puede dar para ganar algún partido, pero a la larga, cuando los equipos te conozcan… No tenemos un Blanco Leschuk o un Llorente. No es la solución. La solución la hemos encontrado, es la forma de jugar que tenemos pero sin esos despistes, sin los dos, tres, cuatro, cinco minutos de ese error que nos cuesta los partidos”.

Cómo sumar 41 puntos en 29 jornadas: “Creo que este Málaga está capacitado para conseguirlo. Si en 29 partidos que quedan no sumamos 41, que no es ni 1,5 de media, merece descender. Capacitados estamos pero hay que demostrarlo. No veo imposible ganar en Cartagena y luego en casa al Sporting. Habría apostado a que le ganábamos al Eibar. Nunca es un mal momento para ponerse esta camiseta y representar a esta ciudad, es una lotería que nos ha tocado como jugadores. A veces las camisetas pesan, pero no hay nadie en el vestuario que piense que esto es un marrón, están felices de estar aquí. Con nueve puntos y un ambiente espectacular en el estadio durante el partido. Sentí el aliento y el empuje. Luego es normal que nos digan cosas, lo aceptamos y lo comprendemos, pero somos afortunados. Estoy seguro de que le vamos a dar la vuelta”.