Indignación en el Levante por el gol anulado a Bouldini
Con 0-0 en el marcador, Cordero Vega y el VAR optaron por anular un polémico tanto del delantero marroquí. Las imágenes hablan por sí solas.
“Ves la línea del fuera de juego y te dan ganas de irte”, así de contundente se mostró Javier Calleja en sala de prensa para analizar el empate del Levante frente al Villarreal B. La jugada polémica surgió en el minuto 52 de partido, cuando Bouldini fusilaba las mallas tras recibir un ajustadísimo pase de Carlos Álvarez. Tras la celebración de todo el Ciutat de València, saltó la polémica.
Con las pulsaciones disparadas, Cordero Vega se echó la mano al oído ante el jolgorio de la grada de Orriols. La acción iba a ser revisada en el VAR, con Gálvez Rascón al frente y Ramos Cinos como asistente. Tras cinco largos minutos, decretaron que el gol había de Bouldini era en posición ilegal. Las imágenes hablan por sí solas.
Calleja, por su parte, mostró su enfado al analizar la jugada: “Yo no lo entiendo, de verdad que no lo entiendo. Me cuesta mucho entender que una máquina tarde 5 minutos en ver si es o no fuera de juego. Son jugadas claras, la decisión tiene que ser rápida. El árbitro y el linier consideran que es gol, me dice el juez de línea que para él está en posición correcta. Después de 5 minutos ves la jugada y la línea y te dan ganas de irte. Es surrealista, yo no me lo creo. Cuando no está tan claro, vamos a premiar el futbol, los goles y el espectáculo. Si es claro, fuera de juego, pero en una jugada así, cuando tardas tanto tiempo en pitarla, no lo tienes claro. Y las líneas no aclaran el fuera de juego. Me parece una equivocación y que así no se puede actuar y que tienen que cambiar. Que sean jugadas en las que no haya dudas. El penalti también lo hablo con el árbitro y no lo entiendo, contacta primero Lozano con el balón y luego se lo llevan por delante de una patada, es penalti. Para mí es claro. Es una jugadas que puede marcar el devenir del partido”.
Cabe recordar que el Levante se quedó fuera de los puestos de ascenso directo la pasada temporada al perder el golaverage particular con Las Palmas. Cualquier punto que sale sospechosamente de Orriols hace sangre en una afición que todavía no ha cicatrizado la herida del no ascenso, con la jugada de Róber Pier en el último minuto frente al Alavés todavía en la retina. Esta es una más.