Ibai Gómez pone su cargo a disposición del club
El técnico está tocado tras la derrota ante el Castellón y ha pedido una reunión con el club para ver si sigue o no. “No tiro la toalla, pero asumo la responsabilidad de la situación”.
El Andorra está hundido y los fantasmas del descenso empiezan a aparecer, con muchísima fuerza, en el Principado. El bloque tricolor que arrancó la campaña de manera notable está en dinámica de claro suspenso. Acumulan ocho jornadas sin vencer y únicamente han sumado tres puntos de los últimos 24 y esto provoca que Ibai Gómez quede muy tocado. Todavía no hundido, pero las próximas horas serán claves. De momento, el técnico ha pedido reunirse con los directivos para tomar una decisión sobre su futuro.
Ibai Gómez, tras el encuentro ante el Castellón, tiró de sinceridad y habló sin tapujos. Facilita al club la decisión y si consideran que su etapa debe finalizar, él no pondrá problemas. El balón está sobre el tejado de la directiva: “Nos vamos a juntar a hablar y ver qué es lo mejor para el club y el equipo. La decisión que sea mejor, se tomará. Tenemos el respaldo de jugadores y club, que nos transmiten confianza, pero hay que ponerlo sobre la mesa”. El técnico no escondió que “estoy muy jodido, me siento muy responsable. Puede ser el momento de tomar alguna decisión por lo que ha transmitido hoy el equipo. Faltó alma, energía. No me gusta tirar la toalla, pero es lo que no puede faltarle al equipo nunca. Son ocho jornadas sin ganar y hay que ser consciente de la situación. Nos juntaremos ahora con el club y a ver qué se puede decidir. Asumo la responsabilidad“.
Al técnico no le tembló el pulso a la hora de hablar de la difícil situación del equipo y quedó claro que si se considera que el problema es él, se irá: “Sientes que algo se degenera. Estamos en ese punto que nos hacen demasiado daño con cada acción en contra. Hoy hay poco que analizar porque no estuvimos bien en ninguna de las facetas del juego. Hay veces que necesitas un pequeño cambio. No voy a confirmar nada, pero la posibilidad de irme está ahí”.
El equipo acumula sensaciones muy negativas y el propio Ibai explicó que “tengo el respaldo de todos con los que hablo, pero ha sido un paso atrás muy grande en cuanto a sensaciones. Hay veces que en la vida no se dan las cosas como quieres y deseas y hay que asumirlas. Es un aprendizahe. No tiro la toalla y me veo con fuerzas para seguir, pero también quiero lo mejor para el club y los jugadores. Hay que ponerlo sobre la mesa y si creemos que hemos de seguir pues lo haremos convencidos de que la situación cambiará. Pero quiero dar esa posibilidad al club de de ver si pueden encontrar un cambio o ven que un cambio es lo mejor".
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Por último, insistió: “No es dimitir ni que me despidan. Tenemos una relación muy buena con el club, muy fluida y por eso hay que ponérselo fácil al club. Entra más lo personal que lo profesional. Aunque a veces cueste hay que ser sinceros“.
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