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LAS PALMAS

García Pimienta le da una vuelta

El entrenador de Las Palmas, ante los problemas de su equipo con la superioridad numérica, insiste: “También hay que poner en valor lo que hace el rival”.

Las Palmas
García Pimienta le da una vuelta
Carlos Diaz-Recio

Laboralmente hablando, la Ciudad Deportiva de Las Palmas se encuentra en un paraje inigualable. Sin más sonido que el del viento, escaso, y la cortadora de césped, el centro neurálgico del primer equipo amarillo se despereza poco a poco mientras empieza el goteo de futbolistas dispuestas a encarar una nueva jornada laboral. “Todo bien”, confirmaba esta mañana, a lo lejos, Jonathan Viera, perenne su sonrisa del jugón, que mañana reaparece tras dos partidos ausente por problemas gripales.

Arriba, en lo alto la colina de Barranco Seco, a las afueras de la capital grancanaria, no molesta ni siquiera el colegio que se encuentra justo debajo. El entorno, idílico. Todo está listo para que arranque el viernes de Las Palmas Los dos campos de césped natural, al punto. El entrenamiento cerca de comenzar. Y la cabeza del entrenador, tanto en el trabajo al aire libre como en las tripas de la Ciudad Deportiva, en plena ebullición. “Tenemos que darle una vuelta para que el contrario lo acabe pasando muy mal”, dijo esta mañana García Pimienta en la sala de prensa de la coqueta instalación en la que, como siempre, se presentó con una puntualidad exquisita. Se refería el entrenador de la UD a partidos como los últimos fuera de casa, sendos 0-0 en Leganés y Andorra, que su equipo no pudo ganar pese a jugar a inmensa mayoría del tiempo con un jugador más. “Tampoco es que haya sido por relajación o por no querer ir a ganar”, insistió al tiempo que afirmaba: “También tenemos que poner en valor lo que hacen nuestros rivales”.

Acumula Las Palmas ocho jornadas comandando la clasificación. Pese a los dos empates en superioridad numérica que le impidieron meterle a la clasificación un hachazo descomunal, tampoco es que cunda la decepción en su vestuario. “No lo veo como una oportunidad perdida. Jugamos contra uno más ante Racing, Leganés o Andorra, pero el equipo lo intentó siempre (ganar)”, insistía el jefe del banquillo de la UD. Aquella puesta “en valor” la ejemplificó consigo mismo: “Es que cuando juegas contra 10 el plan de partido cambia completamente. Nosotros somos una muestra clara lo difícil que a veces resulta: en Villarreal jugamos con uno menos desde el minuto 15, cuando expulsaron a Nuke, y fuimos capaces de ganar el partido”.

Málaga.

A García Pimienta le tocará darle esa “vuelta” a su equipo mañana, desde las 20.00 horas, cuando reciba al Málaga. “Ahora es un equipo mucho más peligroso”, dijo del equipo costasoleño. “Nos equivocaremos mucho si miramos la clasificación. Es la grandez de este deporte”, advierte el entrenador de Las Palmas, que también confirmó las bajas de Vitolo, Sandro y Marc Cardona, al tiempo que sugirió que Kirian podría volver a la convocatoria pese a que su reaparición continúe siendo una incógnita.

Por su parte, Jonathan Viera ya está dentro del grupo de los disponibles. “Sí”, afirmó rotundo su jefe cuando fue preguntado por la participación del capitán y emblema de su equipo. Si mañana fuera amonestado con una tarjeta amarilla no podría jugar contra el Tenerife. “Me preocupa cero. La temporada no sé ni cuántos partidos estuvo con cuatro tarjetas amarillas. Aguantó hasta en la última jornada, en Gijón. Tiene 33 años y muchísimos partidos a nivel profesional, así que si alguien puede controlar esta situación, es él”, sentenció.

El mediapunta será por tanto de la partida ante el Málaga. “No espero a un Málaga ansioso, pero sí es verdad que tenemos que usar a nuestro favor que esté a 10 puntos de la salvación”, consideraba. “Siempre, claro, que los tengamos lejos de nuestra portería, presionando y sin dejarles respirar”, dijo. Pese a la figura de Rubén Castro, repartió el peligro: “No vamos a descubrirle ahora, que sigue marcado goles con 41 años y batiendo récords. Si solo fuera Rubén Castro todo sería muy bonito, pero el Málaga tiene muchos más argumentos: Febas, Junio…”.