García Pimienta contra Miguel Ángel Ramírez
El entrenador de Las Palmas se enfrentará al técnico grancanario el domingo. “Va a haber una pequeña lucha por el balón” avanzó el barcelonés.
Fue pronunciar al inicio de la rueda de prensa el nombre del técnico rival, Miguel Ángel Ramírez, y a García Pimienta se le escapó una media sonrisa y su rictus perdió vigencia. Normal. Quizá no tuvo nada que ver con el entrenador visitante de este domingo a las 20:00 h o quizá pudo ser porque ese nombre en Las Palmas tiene mucha más connotaciones, especialmente en el club de Miguel Ángel Ramírez. Jefe de García Pimienta.
Quien sabe si en otro universo paralelo —no muy lejano— bajo la presidencia de Miguel Ángel Ramírez —Alonso— hubiera estado sentado en el banquillo de Las Palmas otro Miguel Ángel Ramírez —Medina—, grancanario y ganador de la Copa Sudamericana. Y fuera —Xavier— García Pimienta el que visitara el Gran Canaria con el Sporting. Lo segundo, al menos, se rumoreó hace poco más de un año en Gijón.
De haberse dado esa circunstancia, no sería muy extraño que García Pimienta hablara en los mismos términos de la U.D. de lo que hizo esta mañana en la rueda de prensa cuando analizó al Sporting, de Miguel Ángel Ramírez —Medina—. “Es un equipo que quiere el balón que muestra aspectos asociativos y que quiere ser protagonista”, afirmaba el técnico barcelonés de su rival. Un estilo que trae de Asturias el Sporting pero que sin duda resuena en la tradición amarilla. “Ha subido su posesión del balón y eso les hace un equipo más peligroso porque cuando nos quitan el balón, sufrimos”, advertía el estratega.
“Me imagino un equipo que quiere ser protagonista con el balón”, continuaba detallando García Pimienta. Y de ahí que no se extraña un choque de espejos. “Se enfrenta a un equipo como el nuestro que también, desde toda la temporada, quiere lo mismo. Por lo tanto va a haber una pequeña lucha por el balón para hacerse más fuerte”.
Siguiendo con el ejercicio de visualización, le llegaba el turno a la defensa. Y aquí el propio entrenador dudaba de sus dotes predictivas. “Es una suposición mía, aunque no tengo ni idea”. Para hacerlo tiró de hemeroteca y buscó el equipo más análogo a la U.D., el Andorra. De otro viejo conocido en Gran Canaria, Éder Sarabia. Cosas de la tradición. “En la primera parte apretó arriba. Me imagino que no se van a meter abajo a defender”, explicaba con precaución, añadiendo un asterisco, “si somos capaces de progresar en el juego, tendrán un perfil más bajo. Pero espero que vayan a presionar arriba”.
No obstante, universos paralelos aparte, en el que estamos, García Pimienta dirige a una U.D. que está fuera del ascenso directo por la diferencia de goles y Miguel Ángel Ramírez —Medina— visita Gran Canaria escuchando el aliento de la Ponferradina tras de sí y los lamentos de los caídos a la 1ª RFEF de fondo. Es por ello que amarillos y rojiblancos se enfrenta entre sí pero también contra los ecos de sus momentos.