El vestuario del Oviedo, insatisfecho tras el empate

A pesar de que la racha sin perder sigue creciendo y que el Oviedo dominó y fue merecedor de algo más que un empate, la sensación dentro del vestuario azul era la de oportunidad perdida tras la igualada sin goles ante el Amorebieta. Había tenido opciones claras el equipo de Carrión y, sobre todo, había sometido de forma clara a su rival en los últimos 20 minutos cuando el conjunto local se había quedado con un futbolista menos por la doble amarilla vista por Carbonell.

Las reflexiones de Carrión fueron por un camino similar. La de orgullo por el papel que habían seguido los suyos pero con esa pena evidente por no cerrar un triunfo que habría hecho crecer de una forma más notable al equipo en la tabla. “Cuando teníamos uno más llegamos mucho por fuera, pero estuvimos imprecisos en los centros laterales. A veces hemos circulado poco. No acabamos de abrirles del todo. Es complicado cuando están tan atrás. No hemos estado preciso, pero no estuvimos mal del todo”, explicó el entrenador de los azules sobre lo que había visto sobre el terreno de juego. Además, el técnico analizó que “en la primera parte presionaron bien, nosotros no nos aprovechamos, aunque tuvimos el balón. Salimos alguna vez bien y tuvimos dos claras. En la segunda ellos transitaron y nosotros dominamos más. Al final, con uno más, nos faltó precisión en los centros y velocidad. Es normal que nos haya costado”.

Para Carrión, la reacción de los suyos al acabar el choque indica la ambición de este equipo. Porque la idea dentro de la caseta sigue siendo la de recortar puestos en la tabla y deshacer el mal inicio, de la mano del anterior técnico, Álvaro Cervera, que sigue lastrando al equipo carbayón. “Los jugadores estaban fastidiados en el vestuario, excesivamente fastidiados. Eso tiene su parte buena. Están así por no ganar. Hay que tener tranquilidad, cuando se intenta todo lo que se pueda no se puede recriminar nada. Todos quieren hacerlo bien. Estaban fundidos y cabreados por no ganar ante toda la gente que ha venido. Cuando he entrado el vestuario y he visto a la gente demasiado fastidiada, insisto, pero me parece bien. Se han dejado todo y hay poco que reprocharle a los futbolistas”.

Molestias de Luismi y regreso de Alemao

El choque terminó además con preocupación por la sustitución de Luismi, que atravesó molestias desde el inicio del partido y tuvo que ser cambiado al descanso por Jimmy. Carrión expuso al final del choque que el cambio se había debido a esas molestias: “Estaba cargado de aductor, veía que no era el Luismi de siempre. Me ha dicho que estaba cargado y hemos decidido cambiarlo”.

Pero también hubo una buena noticia: el regreso de Alemao. El delantero volvió a disfrutar de minutos varias semanas después. Cayó lesionado ante el Burgos, en la tercera jornada, y tardó en recuperarse de su esguince de rodilla. Ahora, es uno más en la rotación. “Alemao salió porque cuando ellos estaban con diez, en situaciones cerradas, queríamos tener más referencia en el área. Estuvo bien en líneas generales”.