El Tenerife, con la puerta abierta
Los blanquiazules acumulan siete partidos -entre Liga y Copa del Rey-, sin poder evitar encajar. Es más, en lo que va de campaña, solo en seis duelos acabaron imbatidos.
El Tenerife versión 22/23 dista bastante del equipo sólido de la temporada anterior. Entre otras cosas, porque ya no es tan fiable defensivamente. Los números son tan elocuentes como categóricos: hace siete partidos que la portería blanquiazul no acaba a cero y eso el equipo lo nota.
Ni Juan Soriano ni Javi Díaz han conseguido blindar su arco en las recientes semanas ya que la última vez que no se encajó fue el 19 de noviembre del año pasado contra el Huesca (2-0). Curiosamente aquel fue el tercer duelo seguido sin recibir goles (antes contra el Burgos y el Lealtad), pero desde entonces ya no se volvió a repetir.
En estos casi dos meses se midieron al Tenerife Las Palmas (3-1), Real Oviedo (0-1), Deportivo Alavés (2-1), Villarreal B (2-2), Andorra (1-1), Pontevedra (2-1) y Málaga (1-1) y en todos se encajó.
La jornada pasada, cerca se estuvo de romper este dato en La Rosaleda, pero Rubén Castro -VAR mediante-, impidió no sólo sumar los tres puntos, sino encajar el empate cuando quedaban pocos minutos para el final.
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De momento, en lo que va de campeonato, los de Luis Miguel Ramis solamente consiguieron terminar imbatidos en seis partidos (el 25% de los duelos disputados). Bien diferente era la situación el certamen anterior donde los insulares fueron una de las porterías más fiables de todo el campeonato (solo superados por el Almería).
Ante la Ponferradina este sábado toca cerrar la puerta del gol para recuperar sensaciones y alejarse de la zona baja, aunque los precedentes ante los bercianos no ayuden demasiado: ninguno de los nueve enfrentamientos entre sí terminó 0-0. Yuri, Dani Ojeda, el ex blanquiazul Naranjo o Derik se lo podrán complicado.
