El sistema de Bolo no funciona lejos de El Plantío
Los malos resultados fuera de casa afean la gran trayectoria ante sus aficionado del conjunto burgalés.
El Burgos ha perdido los cinco encuentros que ha disputado fuera de casa. Hasta el último partido ante el Tenerife, Jon Pérez Bolo, había confiado en el nuevo sistema que había implantado este año en el equipo, muy diferente al del año pasado: juego atrevido, valiente, con presión alta, y yendo a buscar al rival a su campo. Los cuatro partidos anteriores se saldaron con derrotas para el equipo blanquinegro, pero con alguna diferencia, ya que en los tres primeros ante el Levante, Sporting y Albacete el Burgos tuvo opciones de puntuar, pero en Valladolid el equipo perdió por tres goles a cero reafirmando las dudas que muestra en defensa y la escasa definición en ataque.
A la vista de que el equipo, lejos de mejorar, ha ido perdiendo consistencia en los desplazamientos, Bolo cambió su idea de juego en Tenerife y desde el inicio plantó una defensa con tres centrales, algo habitual la pasada temporada con Calero. Tras la expulsión de un jugador tinerfeño, en la segunda parte, regresó a su 4-4-2 característico de esta temporada y es cuando equipo se vino abajo. No solamente no fue capaz de aprovechar la ventaja que suponía contar con dos penaltis a favor y un jugador más, si no que el equipo tinerfeño con un hombre menos se adelantó dos veces en el marcador. Otra vez aparecieron los graves errores defensivos y de concentración que privaron al Burgos de poder puntuar por primera vez esta emporada fuera de casa.
Los aficionados burgaleses que habitualmente acompañan al equipo en gran número en los desplazamientos siguen sin llevarse una alegría, e incluso el técnico ha empezado a recibir las primeras críticas en diferentes redes sociales.
Lo que está claro es que este equipo no funciona lejos de El Plantío, dando síntomas de impotencia cuando juega fuera. A los defectos en defensa se une el escaso acierto de sus delanteros si exceptuamos a Curro que ya lleva ocho goles, aunque cinco de ellos hayan sido conseguidos desde el punto de penalti. Otro dato alarmante es que ha recibido doce goles en cinco encuentros siendo el equipo más goleado en los partidos de fuera de casa.
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