El (re)momento de Izan Merino
Con Juanpe y Brasanac fuera, el canterano emerge como alternativa en León tras no contar en los dos últimos partidos. Pellicer habló de su proceso de readaptación tras el Mundial Sub-20.
Con la baja de Juanpe para varias semanas y de Darko Brasanac, que no llegará al partido en León ante la Cultu, se le abre la puerta de par en par a Izan Merino. Es el recambio más natural de Juanpe, con unas características que se asemejan a las prestaciones del jerezano, aunque Izan también puede tapar algún boquete, ya sea como central, en una posición que no es la suya pero en la que va aprendiendo, o como centrocampista con algo más de llegada. Esa versatilidad es una de sus mayores virtudes y ofrece a Pellicer una alternativa valiosa en el centro del campo.
En este contexto, la no participación de Izan Merino en los dos últimos partidos del Málaga, tanto en Castalia como frente al Córdoba en La Rosaleda, resultó cuanto menos llamativa. No se trata de un jugador que haya perdido protagonismo de manera definitiva. Antes de marcharse al Mundial Sub-20, Izan había sido pieza habitual del equipo y había disputado la gran mayoría de minutos en las primeras jornadas de la temporada. Exceptuando el encuentro contra la Real Sociedad (67′), había jugado los 90 minutos en las primeras cuatro jornadas, sumando además un bagaje importante en pretemporada que le confería continuidad y ritmo de competición.
El regreso de Izan a Málaga hace justo un mes tras ese Mundial supone un proceso natural de volver a aclimatarse. Vivir una experiencia internacional enriquecedora, salir de la rutina habitual genera un periodo de ajuste, especialmente para un jugador joven. Además, pequeñas molestias físicas, como un problema de tobillo arrastrado desde esa cita mundialista, incluso ya de antes en Málaga, pueden haber condicionado su participación inmediata.
Desde su regreso, Izan no ha vuelto a jugar desde el partido de Copa del Rey en Estepona, el pasado 30 de octubre, donde disputó los 90 minutos. Antes de esa cita apenas había acumulado 56 minutos, entre la victoria frente al Andorra en La Rosaleda y la derrota en Leganés. Sin embargo, su experiencia y rendimiento previo indican que su protagonismo puede volver a ser total.
“Cuando mejor estaba y más lo necesitábamos se fue con la selección. También con las molestias en el tobillo. Hizo un Mundial perfecto que le dio una experiencia brutal como central, donde jugó en Estepona. Pero es verdad que le ha costado cuando ha venido del viaje. Esta semana lo veo como siempre. Izan es patrimonio nuestro y yo le tengo muchísima confianza. Él va a tener su espacio y no por las lesiones. Y tampoco creo que haya que darle esa responsabilidad. Hay un ejemplo claro. El año pasado fuimos a Eibar, Izan no jugó y entró Rafa. Luego vino el partido del Granada y todo el mundo se echaba la medalla de Rafa. Jugó Izan ante el Granada y lo hizo espectacular. Hay que saber gestionar", analizaba Pellicer la situación de Izan Merino en la previa, zanjando el tema.
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Con Juanpe y Brasanac fuera, Pellicer cuenta con varias variantes para completar un centro del campo fiable: los Carlos Dotor, Dani Lorenzo o el pichichi Rafa Rodríguez; pero Izan Merino se perfila como la opción más clara para ser el eje en León. Su sitio natural, por cómo está ideada la plantilla del Málaga, sigue siendo la posición de pivote de Juanpe, donde más puede aportar al equipo.
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