El Oviedo recupera la pólvora y ya gana
Bastón y Sangalli, autores de los goles en el triunfo de los de Bolo ante el Avilés (1-2)
El primer triunfo del Oviedo este verano llegó de la mano de Bastón, su killer. Regresó el 9 y tardó dos minutos en marcar. Y con el tanto, adiós a las dudas sobre la efectividad de los azules arriba. Sangalli terminaría de darle la vuelta a un partido peleado por el Avilés.
Salió mandón el Oviedo, con Jimmy y Rama tratando de llevar la manija ante un Avilés que se defendió con mucho orden. Flores dejó algunos chispazos de su clase en los inicios, especialmente cuando se asoció con Borja, pero nunca encontró rematador. Obeng nunca logró librarse de su marca.
Tras ese dominio azul de inicio, el Avilés se estiró. Probó a Braat desde lejos y acosó a los azules desde la esquina. En un rechace de un córner, el balón llegó a Juan López, que la puso medida a la cabeza de Morcillo. El veterano central remató sin oposición a la red.
Trató el Oviedo responder, pero a los de Bolo les faltaba algo de gasolina y otro poco de ideas. Sus intentos no lograban acceder a la zona de tres cuartos, dejando claro que al equipo aún le quedan mejoras pendientes de cara al inicio de la competición, en algo más de una semana.
Bolo movió el banquillo al descanso, dando entrada a diez hombres nuevos. Entre ellos, Borja Bastón, que se había perdido los últimos amistosos, justo en plena sequía anotadora de los azules. A los dos minutos de estar en el campo, recibió el profundidad y batió al meta del Avilés con calidad. El gol le estaba esperando.
El segundo, aunque lo rozó Bastón, fue de Sangalli, tras un espléndido servicio de Bretones desde la izquierda.