El ocaso de N’diaye en La Rosaleda

El Málaga decidió apartar a Alfred N’diaye tras su ausencia injustificada en el entrenamiento del pasado miércoles. El club ha decidido poner fin a su aportación al equipo en este aciago regreso del internacional senegalés a La Rosaleda. Si no hay un cambio radical de opinión en los despachos, Pellicer no volverá a contar con él.

El regreso al Málaga de N’diaye ha sido un fiasco. El futbolista llegó como refuerzo estrella en la recta final del mercado veraniego y, quitando varias actuaciones decentes en el primer tramo del campeonato, su rendimiento ha sido nulo. Su estado físico es muy discutible y su jerarquía sobre el césped ha brillado por su ausencia.

Aun así, y dada la floja aportación de la mayoría de centrocampistas del equipo, N’diaye ha contado para los tres entrenadores del curso: Pablo Guede, Pepe Mel y Sergio Pellicer. Con este último ha estado disponible en cinco de sus ocho partidos y ha tenido minutos en cuatro, tres de ellos como titular. En total, 255 minutos ha estado en el campo con el técnico de Nules.

Hasta la llegada de Pellicer al banquillo, N’diaye había participado en un total de 18 partidos oficiales, 16 de Liga y dos de Copa, para un total de 1.351 minutos. Su único gol de la temporada se lo marcó en el torneo del KO al Nàstic, pero sirvió de muy poco ya que el Málaga perdió 2-1 y acabó eliminado.

Este lunes, en la vuelta este lunes a los entrenamientos, se ha ejercitado en solitario y esa se prevé que sea la tónica habitual hasta final de temporada. N’diaye tiene por delante un ocaso difícil en La Rosaleda. Su flojo rendimiento y su indisciplina de la semana pasada le han condenado a protagonizar un amargo cierre de su etapa como jugador del Málaga, que concluirá a final del presente curso.