El mes y medio que le dio la puntilla al Alcorcón
De las seis últimas jornadas los alfareros los alfareros solamente han sumado 3 de 18 puntos posibles. Sequía goleadora y bajas importantes han salpicado la marcha del equipo.
El calendario marcaba mediados del mes de abril. La AD Alcorcón había ganado el lunes 15 de abril por 1-0 al Villarreal B gracias a un gol de Chiki. Esa victoria dejaba al Alcorcón 16º con 40 puntos y tres por encima del descenso. Un colchón mínimo pero importantísimo y los alfareros dependían de sí mismo. Estaba por encima de Cartagena, Mirandés, Amorebieta o Albacete y acercándose al Eldense. Mes y medio después tras empatar a dos en Valencia frente al Levante el Alcorcón consumaba su segundo descenso en tres temporadas a Primera Federación. ¿Qué ha podido pasar? Probablemente se lo pregunte más de uno en el club, en el vestuario y en la afición.
Ha pasado que, en seis partidos, de 18 puntos posibles, el Alcorcón solamente ha sumado tres empates y tres derrotas. Es decir, tres paupérrimos puntos. Ese es el bagaje alfarero. Tras el encuentro frente al Villarreal se perdió fuera contra el Eibar, el Cartagena y el Racing de Ferrol. Se empató en casa frente al Valladolid y al Eldense y fuera frente al Levante. El Alcorcón ha tenido toda la temporada el debe del gol. Solamente ha marcado 31 goles. El equipo que menos en toda la temporada. En estas últimas seis jornadas el Alcorcón ha marcado cuatro goles y ha recibido ocho. El máximo goleador es Dyego Sousa que ha anotado seis tantos. Un Sousa que ha sido más veces noticia por sus sucesos extradeportivos que por lo que ha hecho en el terreno de juego, que ha sido pitado por la afición y cuyo rendimiento ha estado muy lejos de lo esperado. Sin gol no hay alegría.
Además, en estas seis semanas Nafti ha tenido que lidiar con bajas importantes. Ninguno de sus dos mediocentros titulares que habían sido un motor como, Javi Pérez y Eteki, jugaron frente al Levante. Pérez se lesionó a los 13 minutos frente al Valladolid y Eteki llevaba varias semanas lesionado. Hay que unirle a ello la lesión de otro de los titulares, Chiki. O las sanciones de jugadores con muchos minutos en el once como Quintillà, Iago López o Chema Rodríguez. Otros no han estado acertados ni han encontrado el rendimiento buscado en momentos clave como Addai o Marciano. Ni el buen trabajo táctico del equipo. Ni las actuaciones notables de jugadores como Castro, Jesús Ruiz, Víctor García o Jacobo. Ni el oficio de veteranos como Mosquera. Ni la versión mejorada de los Juanma Bravo o Fede Vico han podido salvar al Alcorcón de caer al pozo. El lastre del último mes y medio ha sido demasiado grande. Mientras otros daban pasitos el Alcorcón se estancaba.
El lunes tras consumarse el descenso en Valencia el Club en redes sociales escribía: “Hoy es un día difícil para todos. Jugadores, cuerpo técnico, dirección deportiva, afición, empleados e instituciones hemos trabajado sin descanso durante toda la temporada para conseguir en el campo un objetivo deportivo que se nos ha escapado por poco. Estamos dolidos, Pero no queremos dejar de poner en valor el esfuerzo conjunto de todos Desde mañana continuaremos trabajando juntos para seguir haciendo, día a día, un club mejor para todos y con todos los que quieren y sienten estos colores”.
También jugadores como Castro, héroe del último ascenso: “Ayer fue un día muy difícil para todos nosotros, personalmente siento mucha rabia y tristeza por no haber podido lograr nuestro objetivo, más aún con lo que luchamos y lo cerca que lo tuvimos. Gracias a la afición por su comportamiento y su apoyo en estos momentos tan duros” o Rivas: “Ayer pudo ser uno de los días más complicados que he vivido como jugador, con esa sensación de tristeza e impotencia de haber dado todo y no haber conseguido el objetivo. MUY ORGULLOSO de defender y representar este escudo. Mil gracias de corazón a toda la afición alfarera”. Javi Lara también hacia un hueco a la autocrítica: “Personalmente pienso que no fuimos valientes contra rivales de un nivel parecido al nuestro (Amorebieta, Eldense o Cartagena) y después nos tocó ir a ganar contra rivales de mucha entidad como Valladolid y Levante”.
Lo cierto es que cuando un descenso se produce toca reflexionar porque los errores tocan a todo el club dentro y fuera del terreno de juego. El Alcorcón vuelve a la Primera Federación. No es fácil salir del infierno. Lo saben bien en Santo Domingo. Eso sí, también saben que contarán con el mejor fichaje: la afición. La parroquia alfarera se enganchó al equipo de nuevo la pasada temporada y ha seguido este año con desplazamientos importantes incluidos. Retornar a Segunda pasa porque Santo Domingo se vista de amarillo cada jornada la próxima campaña.
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