El lío judicial de nunca acabar
En febrero se cumplirán seis años desde que el Málaga está administrado judicialmente por José María Muñoz, que ha pasado de salvador a estar en la diana. Abdullah Al Thani no vende y el club sigue en bucle.


El próximo 20 de febrero de 2026 se cumplirán seis años desde que María Ángeles González Ruiz, magistrada del Juzgado de Instrucción 14 de Málaga ordenase el cese de Abdullah Al Thani y sus hijos Nasser, Nayef y Rakan como presidente y consejeros del club, respectivamente para nombrar a José María Muñoz administrador judicial del equipo y de las empresas propietarias Nas Spain 2000 (96’89%) y Nas Football (0’93). Seis años que convierten a Muñoz en el segundo dirigente más lóngevo del Málaga CF solo por detrás del citado Al Tnani (10 años) y por delante de Serafín Roldán (cinco años), Fernando Puche y Fernando Sanz (cuatro) y Federico Beltrán (tres).
De la salvación a la desazón
La destitución de los Al Thani tuvo su origen en una denuncia de la Asociación de Pequeños Accionistas (APA). La deficiente gestión del jeque debilitaba y empobrecía al club. Antonio Aguilera, presidente de esta asociación, explicó que Al Thani había contratado como director general al estadounidense Richard Shaheen “con la misión de liquidar al club”. La alarma social en la provincia fue clamorosa.

El milagro Antoñín
Un mes después de la intervención judicial LaLiga advirtió a Muñoz que, si no ajustaba el límite salarial, el Málaga sería expulsado de la competición como lo fue poco antes el Reus. En ese mes de febrero llegó el milagro. El Granada pagó, fuera de mercado, 1.5 millones de euros por Antoñín para suplir la lesión de larga duración sufrida por Neyder Lozano. “Si no es por ese golpe de fortuna, el equipo habría desaparecido” confiesa el propio Muñoz en círculos cerrados.
El articulo salvador
El Málaga logró acabar esa campaña 2019-20 a duras penas. Pero no estaba claro que pudiera empezar la temporada. Entonces se descubrió un artículo en la reglamentación de LaLiga que permitía competir al Málaga pese a seguir fuera de la adecuación coste plantilla, el 55-17-3. Desde entonces hubo modificaciones que suavizaron las condiciones de otros clubes que pasaron por lo mismo. Debemos admitirlo. LaLiga ayudó al Málaga entodo lo que pudo y más.

Fractura social
Tras dos años de comprensión la figura del administrador judicial empieza a ser cuestionada por parte de la afición por entender que ejerce más como presidente. Tras la marcha de Pellicer en el verano de 2021 empieza el desfile de entrenadores. José Alberto, Natxo González, Pablo Guede, y la vuelta de Sergio Pellicer. El Málaga desciende a Primera RFEF en 2023 y Muñoz emprende un ERE de gran severidad que afecta a empleados y jugadores.
Gol de Antoñito
El año en el infierno es muy duro y el Málaga tiene que conformarse con jugar la promoción de ascenso. Logra el objetivo en Tarragona con un gol de Antoñito Cordero en el 124’. La afición se echa a la calle. Pero tras los fastos, vuelta a la realidad. El Málaga sigue judicializado.

Al Thani no vende
El jeque rechaza todas las propuestas que le llegan para vender su parte del club, mientras que la otra parte propietaria, la hotelera BlueBay mantiene una estrategia para muchos indescifrable. Nada avanza.
Cese de Pellicer
La dubitativa trayectoria en la presente campaña tiene irritada a la afición, que reparte sus iras entre Muñoz y el entrenador. Loren Juarros (director deportivo) y Kike Pérez (director general) tampoco se libran de las censuras. Tras caer en León Pellicer es cesado y el nombramiento de Juan Francisco Funes, técnico de Atlético Malagueño (colista en Segunda RFEF) no levanta pasiones. No obstante, la buena racha del de Loja (11 puntos d 15 posibles) ha hecho que, de momento, se levantre el pulgar.
Mercado de invierno, clave
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El 2 de enero se abre la ventana invernal de fichajes y la afición exige refuerzos porque entiende que con esta plantilla no da para sobrevivir. El asunto es que, para que haya entradas debe haber salidas. Y el club tiene poco margen de maniobra. La previsión de que no vendrán refuerzos está generando murmullos desaprobatorios y sensación de estancamiento con la sensación de que el bucle judicial se va a extender por tiempo indefinido.
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