El gol, lo más buscado en la categoría de plata
16 equipos pretenden incorporar uno o dos arietes en la semana y media de mercado. Sólo seis plantillas tienen sus delanteras cerradas.
Con sólo nueve días de mercado por delante y la competición ya empezada, 16 equipos de Segunda se lanzan a por un nueve capaz de cargar con la responsabilidad del gol. Sólo Cartagena, Oviedo, Huesca, Eibar, Las Palmas y Ponferradina respiran tranquilos al tener sus ataques ya cerrados. Una subasta, la del delantero, en la que sólo las pujas más fuertes saldrán vencedoras, pero no tendrán el éxito asegurado.
La falta de calidad en la posición, las pretensiones económicas y el limitado presupuesto de los clubes de LaLiga SmartBank ha provocado que muchos equipos esperen a los últimos días de verano para aprovecharse de una oportunidad de última hora; es decir, un ariete de Primera sin acomodo en esta categoría, o tener muy clara su apuesta exótica. La mayoría de los equipos necesitados requieren sólo un delantero, pero hay casos, como el del Tenerife, Leganés o Lugo, en los que podrían llegar hasta dos jugadores en esta posición. Una reconstrucción casi completa que podría quedar en nada ante lo codiciado de la demarcación.
El mercado todavía tiene delanteros experimentados y, sobre todo, útiles disponibles. Algunos libres como los Fernando Llorente, Xisco Jiménez, Guido Carrillo, Nano Mesa, Zozulia o Joselu. Otros por los cuales habría que negociar con otro club como Sekou Gassama y Hugo Vallejo, ambos del Valladolid; Mourad, que no continuará en el Elche y la cesión de alguno canterano de Primera como Latasa, del Madrid, o Germán Valera, del Atlético. Estos últimos, deseos más complicados pero igual de ilusionantes.
Pistoleros ya con destino
Por el contrario, otros nombres han ido encontrando destino con el paso de los días: Sergi Enrich (Oviedo), Matheus (Racing), Borja Garcés (Tenerife), Sandro Ramírez (Las Palmas), Darío Poveda (Ibiza), Fran Sol y Rubén Castro (ambos al Málaga) o un Djuka que no renovó con el Sporting hasta 2027 pese al interés de varios equipos de la élite. El último ha sido Bouldini, del descendido Fuenlabrada, por el que se pelearon Granada, Alavés y Levante, pero que pondrá rumbo al equipo valenciano tras el pago de cerca de un millón de euros.
Una carrera de semana y media entre los directores deportivos de la categoría de plata por firmar a esos nueves que todavía tengan la pólvora intacta.