El Cádiz hace aguas en todas sus líneas
Los amarillos cayeron derrotados frente al Huesca en un encuentro que deja en evidencia los problemas del equipo. La sala de máquinas sigue sin carburar y el nivel defensivo es paupérrimo.
Un nuevo batacazo del Cádiz. El viernes noche mostró de nuevo como los amarillos siguen sin funcionar con un Paco López que no consigue dar con la tecla. Siendo equipo que mentalmente y futbolísticamente se encuentra bajo mínimos desde la temporada pasada y donde esta sigue siendo una prolongación de la agonía sufrida, los amarillos siguen sin estar presentes en Segunda División. Con un mal nivel defensivo, problemas en la construcción de juego en el centro del campo y sin ideas en ataque, los gaditanos actualmente hacen aguas en cada línea del campo.
El enfrentamiento frente al Eldense la pasada jornada dio muestras que era momento de tocar piezas. Por eso, con un Fali ya recuperado, la línea defensiva volvía a tener los mismos nombres ya que Glauder regresaba al banquillo. Junto a José Joaquín Matos que no cuajó una buena primera mitad superado por Gerard Valentín y donde concedió un penalti que puede despertar ciertas dudas, se le añadió el segundo penalti cometido por Fali que además pidió el cambio tras este. Por otro lado, Chust sigue sin ser el central que se le espera. El valenciano quedó retratado en el 2-0 de Soko y no fue contundente en primera instancia antes del 3-0. Con 14 goles encajados en ocho jornadas de Liga, la parte defensiva del Cádiz hace aguas y de momento sigue sin tener fin un agujero que poco a poco se incrementa.
La sala de máquinas
Si algo tenía claro Paco López es que las modificaciones en el centro del campo tenían que llegar. Con dos rotaciones, siendo una obligada por la baja de San Emeterio, el técnico alineaba a Álex Fernández, Rubén Alcaraz y Rominigue Kouamé. Siendo un centro del campo con más capacidad para tener la pelota y donde dominar el encuentro debería haber sido la premisa, tampoco se vio una mejora donde Kouamé mostró que con balón puede poner algo de luz dentro de la oscuridad que atesora el Cádiz en construcción.
Jugando Álex tras varias semanas siendo suplente, el madrileño no desentonó pero tampoco pudo cuajar un buen partido a nivel colectivo como el resto de sus compañeros. Además, fue autor de una de las pocas ocasiones que tuvieron los visitantes en El Alcoraz donde casi anota el 0-1 tras un disparo que sacó Dani Jiménez a bocajarro. Por otro lado, Alcaraz, fijo en el esquema de Paco López, sigue sin ser la mitad del jugador que nos tiene acostumbrado desde su llegada a la entidad. Sin apenas aparecer en la construcción de juego, no tuvo su noche cuando erró un penalti en el tramo final del encuentro.
Sin haber encontrado solución y siendo un partido malo a nivel colectivo, estará por ver cuáles pueden ser las siguientes modificaciones de un Paco López que no consigue implantar una idea concreta a unos jugadores que semana tras semana siguen dejando muchas dudas.
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