El ave fénix que quiere regresar para quedarse
Desde que Etxeberria ubicó en la banda izquierda a Stoichkov, el gaditano acumula dos goles
Tener a tu obrero del gol de vuelta siempre es una buena noticia. Y si es un momento donde tu equipo necesita la victoria como el comer para salir del Pozo, aún más. Juan Diego Molina pareció perder el olfato goleador la pasada campaña a la vez que el Eibar se iba apagando semana a semana. En pretemporada fue baja y en el inicio de esta campaña, pasó desapercibido. Sin embargo, como el ave fénix, el matador azulgrana parece estar de vuelta. En las dos últimas jornadas, dos goles de Stoichkov y dos victorias para el Eibar. En el primero abrió la lata, en el segundo la cerró y sirvió para llevarse los tres puntos embotados de Cartagena. Dos goles en dos partidos totalmente diferentes para los armeros, pero con un mismo denominador común: la banda izquierda. El hogar del gaditano. La causa efecto responsable de que el artillero azulgrana haya resurgido para quedarse.
El no tener un delantero fijo y no encontrar el candidato ideal para la punta de lanza del ataque armero llevó a Joseba Etxeberria a probar a Stoichkov en la punta. Desde que se recuperó de su lesión por las molestias de la rodilla izquierda, que lo privó de la pretemporada veraniega, el técnico azulgrana ubicó al gaditano en punta. Contra el Eldense, no fue titular, pero salió en la segunda mitad como recambio de Bautista y fue entonces cuando comenzó su aventura en la punta. Contra el Leganés repitió y en la visita a Burgos, también. En todos ellos, Juan Diego no terminaba de encontrar sus virtudes desde el centro. Le costaba participar, terminar con el peligro y acomodarse igual que desde la banda izquierda, su posición idónea. Fue hace dos jornadas cuando Joseba Etxeberria recolocó al gaditano, en el partido contra el Racing de Ferrol, y lo ha vuelto a hacer esta pasado fin de semana ante el Cartagena. Desde la izquierda y en lugar de Rahmani, quien acostumbró a ocupar el carril izquierdo en las primeras jornadas. Yannis no lo hizo mal, de hecho dio velocidad al juego, pero Stoichkov lo ha aprovechado con creces. Ha recuperado el olfato goleador. Ha vuelto a ser el ratón del área que tanto se añoraba.
Contra los gallegos y también ante los cartageneros. Los goles de Stoichkov han sido oro puro para el Eibar. Tantos que han servido para construir victorias y levantar ánimos. Los 6 puntos han escalado a los armeros posiciones hasta llegar casi a mitad de tabla. Etxeberria explica que aún queda trabajo. La versión del Eibar que quiere dista mucho del conjunto eibarrés de estos momentos, pero el camino y la dirección que lleva su equipo es el correcto para ser quien quieren ser. Sobre todo, teniendo el cuenta el duelo ante el Racing de Ferrol o la primera parte en Cartagonova.