Diego García, el ingeniero entre la certeza del gol y un debate interno
El delantero madrileño ha regresado al Leganés tras un gran curso en el Fuenlabrada (15 goles), pero aún no tiene clara su continuidad en la plantilla. Algunos Segundas lo sondean.
Diego García (Madrid, 23 años) mira al futuro con los aires de incertidumbre en blanquiazul que le han acompañado en los últimos años. El delantero del Leganés, con contrato hasta 2025 después de haber renovado recientemente, se mueve de nuevo entre dos aguas: la de continuar en la primera plantilla o la de marcharse a otro equipo para continuar creciendo. Ambas vías siguen abiertas desde Butarque. Porque, aunque el club quiere apostar por él y confía en sus virtudes, también sabe que la competencia en el primer equipo es compleja y puede estancarle. Hay debate.
Claro que atendiendo al currículum artillero del chaval, no debería haberlo. Su crecimiento goleador ha sido sostenido. Y siempre ascendente. En números y categoría. Después de ser el héroe del ascenso del filial a Segunda RFEF en 2021 con trece dianas, el curso siguiente, de nuevo en el filial, acumuló ocho goles. En ambas temporadas tuvo la ocasión de jugar con los mayores.
Minutos testimoniales la primera campaña, pero con algo más de recorrido la segunda. De hecho, llegó a ser titular en la primera jornada de la 21-22. Pero visto que en la primera plantilla aún no tenía hueco, y que el Leganés B se le quedaba pequeño, el club decidió cederlo en 2022 al Fuenlabrada (Primera RFEF) en un movimiento clave para él y para los azulones.
Los quince goles que marcó entre todas las competiciones sirvieron para atar la salvación de los del Torres y, de paso, ganarse la oportunidad de competir en la primera plantilla del Leganés con más argumentos e incluso por delante de otros iguales, como Manu Garrido, hace dos campañas el ariete del filial con más opciones de quedarse, y ahora mismo, por detrás de Diego. Claro que ese sorpasso no es todavía garantía de continuidad. La pretemporada dictará sentencia. También el mercado.
Competencia y mercado
Porque el Leganés ya ha atado otro ‘9′ (Darío Poveda) y espera al que debería ser referente en ataque en caso de conseguirlo. Jon Karrikaburu es el fichaje más deseado de un club que tampoco pierde de vista otras alternativas sabedor que el ariete navarro de la Real tiene muchas más pretendientes y que su vuelta tras los seis meses que pasó cedido en Leganés no es sencilla. Así que el escenario para Diego es el de una alta competencia que amenaza con opacar de nuevo su rendimiento.
Es ahí donde entra en escena la opción de una salida con doble dirección. Porque hay clubes de Segunda que han preguntado por él (por ahora sólo eso, sólo preguntar) y también otros de Primera RFEF que, estos sí, le ponen ojitos a un futbolista que, sea como fuere, apunta a esperanza del gol en el futuro para el Leganés.
Entre tanto, él mantiene la actitud ambiciosa, pero de perfil bajo con la que ha ido construyendo una carrera de alta responsabilidad profesional. Además de tener nutricionista y preparador físico personal, continúa con sus estudios de Ingeniería en la especialidad de Organización Industrial, buena muestra de que tiene los pies en el suelo sin dejar de soñar en grande, por mucho que al sur de la capital mantenga aires de incertidumbre.