Diakité se convierte en ejemplo
El mediocentro de Malí es titular indiscutible para un Garitano que le ha otorgado una confianza que se ha ganado semana tras semana.

Un nuevo derbi andaluz ya se alza en el horizonte. Después de la victoria frente al Málaga el pasado domingo en La Rosaleda, el Cádiz ya prepara la visita del Granada. Con una victoria lograda en los diez últimos minutos gracias a los cambios de Garitano, hay jugadores que sin hacer ruido fueron claves en el encuentro del domingo. Sumándose a la pareja Chust-Kovacevic, quienes cada jornada que juegan juntos se consolidan más, pasó desapercibido el partido de una de las revelaciones en la temporada para el Cádiz.
Y es que Moussa Diakité, de nuevo, cuajó una actuación formidable. Es tal la costumbre de su buen hacer, que comienza a pasar desapercibido. Con un nivel superlativo, el mediocentro está más que consolidado y es fijo para un Garitano que ha confiado desde el primer día en él. Sobre todo, por unas características de juego más que necesarias en un equipo falto de piernas en el centro del campo.

Mirando a su partido del fin de semana, Diakité tuvo un 87% de pases precisos, acertando 33 de los 38 que pudo dar. Su premisa en el campo está clara: cortar balones, achicar espacios y dársela sin complicaciones a uno de amarillo. Y en esto el de Malí es muy efectivo. De nuevo, sin hacer ruido, cuajó una actuación clave junto a Rubén Alcaraz, quien fue su pareja nueva de baile este fin de semana.
A pesar de que con ambos el conjunto de Garitano pierde algo de rapidez y claridad a la hora de subir el balón hacia campo rival, la solvencia defensiva en campo propio parece que gana la balanza para el técnico vasco. También su físico, el cual se ha convertido en un pilar fundamental en la mejora colectiva del equipo.

Un ejemplo
Con todo esto, Diakité se ha convertido en un futbolista ejemplar. Primero, para los propios compañeros. Actualmente, el joven mediocentro le ha comido la tostada a futbolistas como Gonzalo Escalante o Fede San Emeterio, quienes cuentan con mucha experiencia en Primera y Segunda. Por otro lado, también para los canteranos.
Desde hace un tiempo, cuando el departamento de comunicación del club lo entrevistó, destacó algo que muestra lo centrado que está el jugador. “Me gusta ver jugadores de la cantera en el primer equipo. Si yo hago bien las cosas, habrá más canteranos en el primer equipo. Habrá jugadores de la cantera que subirán si yo sigo así”. Sumado a su fútbol, su calidad humana y su aprendizaje, tras cometer algún que otro error este año, lo están convirtiendo en un futbolista que puede marcar un antes y un después en el centro del campo gaditano.
Acumulando ya diez titularidades en Segunda División y a un rendimiento espectacular, el mediocentro se ha convertido en un seguro de vida para un Cádiz que no veía un ascenso tan positivo de un jugador del filial desde hace varias temporadas.
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