Cuco Ziganda: “No estoy siendo capaz de dar con esa tecla”

¿Cómo ha reaccionado su equipo tras la derrota en el derbi aragonés?

La semana ha ido bien en cuanto a entrenos. Excepto Marc y Enzo el resto están disponibles, si no hay novedad de aquí a mañana. Es una semana que no ha sido fácil por el último partido. Sabemos el partido que tenemos el domingo y lo hemos intentando preparar lo mejor posible y con todas las ganas para darle la vuelta a los resultados de fuera.

¿Les ha costado levantarse de la derrota de La Romareda?

La verdad que dolió la derrota, como fue y la actuación que tuvimos. Veía al equipo mejor y la verdad que el otro día retrocedimos dos pasos hacia atrás. Ahora se trata de coger impulso y retomar las cosas buenas que tiene el equipo. Cuando estamos en casa llevamos el partido donde queremos y somos organizados. Tenemos que conseguir eso porque es nuestra verdadera fortaleza. Esperemos que sea una anécdota.

Seis puntos de 30 a domicilio… ¿Qué le dicen esos datos?

Nos gustaría agarrarnos a la mala suerte o azar pero no puede ser así. Son demasiados partidos y hay mucha diferencia. En nuestro debe esta ver como lo cambiamos. La idea y el planteamiento es la misma pero la dificultad es más. Casi todo está más en lo mental que en lo deportivo, no estoy siendo capaz de dar con esa tecla de jugar con esa confianza o determinación.

Se enfrentan al equipo revelación…

Hay que hacer un gran partido el domingo y ser capaz de ganar al equipo revelación. El Burgos lleva una buena trayectoria, el año pasado ya dejó indicios de como compite y como supera a los contrarios. Este año lo está llevando a un exponente más alto. Nosotros tenemos que ir a sacar los puntos siendo conscientes de donde estamos y las dificultades que estamos teniendo fuera de casa. El año que están haciendo es espectacular, son capaces de minimizar a los contrarios. Defienden muy bien y arriba son capaces de aprovechar las individualidades.

¿Qué importancia le da al partido del domingo?

Es muy importante sumar los tres puntos. Es el último partido del año y te vas con otra sensación. Venimos de derrotas fuera de casa que nos están penalizando y mermando. Sientes rabia interior de no sacar y conseguir esos resultados que nos gustaría. A ver si somos capaces de engancharnos a ese nivel que estamos dando en casa. La última derrota ha escocido a nivel personal y colectivo.