Borja Jiménez entra en juego en El Molinón ante su bestia negra
El técnico abulense se estrena en el banquillo rojiblanco frente a un Racing al que solo ha ganado una vez y ninguna el Sporting en los tres últimos años.
El Molinón-Quini acoge este Día del Pilar el partido más atractivo de la jornada en LaLiga Hypermotion, en la Segunda División, a la vista de todas las circunstancias que se dan para elevar aún más el interés en esta cita. Sin duda, la más importante es el estreno de Borja Jiménez en el banquillo local al frente de un equipo que ha perdido sus últimos cinco encuentros y que intentará volver a encontrarse con el triunfo frente al colíder de la categoría, el Racing de Santander (sigue el encuentro en directo en As.com).
Si la trayectoria del equipo cántabro en este inicio de campeonato ya es suficiente para calibrar la dificultad del choque para los locales, a ello hay que añadir las estadísticas de los enfrentamientos recientes tanto del nuevo entrenador sportinguista como de su equipo. El Racing es, sin duda, la bestia negra para ambos y tienen el reto de romper ese maleficio que les persigue ante el cuadro santanderino.
El Racing de Santander es el equipo al que más veces se ha enfrentado Borja Jiménez como entrenador. Ha sido en once ocasiones y su balance no puede ser más negativo porque solo ha sido capaz de ganar una vez y en otras dos al menos no perdió, empató; por tanto, el saldo es de ocho derrotas. Pero es que el Sporting reciente no anda lejos porque no ha sido capaz de ganar un solo partido a los racinguistas desde la pandemia; seis derrotas consecutivas y un empate, el del año pasado precisamente en El Molinón.
Pero esas no son más que estadísticas y, como dice el tópico, están para romperlas. Por eso, la ilusión, junto a la motivación, que siempre generan estos cambios para dar vuelta a las malas trayectorias será lo que impere hoy entre los sportinguistas. Los últimos relevos de entrenador resultaron al menos positivos en el primer partido para los gijoneses; Garitano y Ramírez ganaron en sus respectivos estrenos y muchos querrán agarrarse a ello, además de tirar del no menos tópico: “Entrenador nuevo, victoria segura”.
Sea como sea, allá por la media tarde dominical se despejarán las dudas, pero el Sporting tiene la ocasión de reconciliarse con sus seguidores. El último partido en El Molinón acabó con una monumental bronca al equipo local por el histórico e inédito 3-4 después de que el Albacete remontase el 3-0 que estuvo a punto de llegar al descanso. Los jugadores rojiblancos tendrán la oportunidad de reivindicarse y también de limpiar la imagen que dejaron la pasada jornada en su visita a Castalia, donde también perdieron por un claro 3-1 que acabó con la etapa de Asier Garitano en Gijón.
Borja Jiménez ha podido trabajar con su nuevo equipo desde el pasado miércoles. El joven técnico tuvo tiempo de introducir aquellas novedades que puedan comenzar a darle la vuelta a la situación. No se esperan grandes cambios en la alineación respecto al equipo base utilizado por Garitano jornada a jornada, porque el Sporting no va sobrado de fondo de armario, pero se espera alguna variación más que nada por aquello de sorprender al rival.
Quien no quiere apearse de lo alto de la clasificación es el Racing, que viene de encontrar una improvisada solidez defensiva ante un Málaga al que también acabó ganando en superioridad numérica. José Alberto dará continuidad a los centrales Pablo Ramón y Facu González, acompañados del incontestable Jorge Salinas, aunque sí habrá un cambio en defensa: Michelin por Mantilla. Al camargués, hombre de absoluta confianza del que fuera técnico sportinguista, le están sacando de punto los extremos rivales esta temporada y al equipo cántabro le están siempre buscando las cosquillas por ahí. La apuesta por el lateral francés, además, suma enteros ya no solo en el ataque, sino también en el lanzamiento del balón parado.
Otro cambio se prevé en la sala de máquinas. Si bien José Alberto nunca ha ocultado que a él le gustan los volantes de ida y vuelta, todo apunta a que Gustavo Puerta (fichado este verano a golpe de talonario) volverá al once inicial. El colombiano, que está en pleno proceso de adaptación, aún es un melón por abrir y su aportación hasta la fecha ha sido más bien tímida. Junto a él, Maguette Gueye le ganaría la partida a un Aldasoro que tampoco ha comenzado la temporada como seguramente pensaban en el club cuando le mejoraron el contrato el pasado verano.
Y arriba seguirán los mismos. Andrés Martín es indiscutible para José Alberto, es el único atacante que no ha entrado en la rotación, y junto a él estarán Iñigo Vicente y otro incombustible, Sangalli, cuyas obligaciones tácticas le hacen superar los 12 kilómetros cada partido. En la delantera, el regreso de Juan Carlos Arana quedará relegado al banquillo junto a un Jeremy que, pese a llevar cuatro goles y ser el mejor en los últimos partidos, sigue teniendo por delante a Villalibre, que viene de anotar su quinto gol de la temporada.
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El Molinón-Quini se viste de gala para vivir un nuevo Sporting-Racing, el número 49 de la historia en el estadio gijonés, el vigésimo segundo en la categoría de plata del fútbol español. En ausencia del Oviedo, este duelo pasa a ser casi el derbi de la temporada y provocará el mejor ambiente en las gradas, donde se esperan más de 1.500 racinguistas salpicando de blanco y verde el estadio más antiguo del fútbol español. Las limitaciones de entradas que los clubes intercambian vienen lastrando la posibilidad de que se alcancen llenos espectaculares en todos los escenarios.
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