Aprobados y suspensos: el Pucela es un trapecista sin red
La segunda derrota en casa deja números pobres en Zorrilla. Los graves errores condenan a Almada y su ‘troupe’.


El Real Valladolid tiene unos números muy pobres como local ya que solo ha sumado ocho puntos de 18, es decir manos de la mitad, por culpa de las dos derrotas y dos empates que le han arrancado sus rivales. Ante el Sporting acusó los errores propios y también la falta flagrante y alarmante de gol... a pesar de marcar dos. Mucho que mejorar y corregir y Almada tiene la llave... si es que no la ha perdido.
Guilherme: le fusilaron en los goles y poco pudo hacer; en el penalti acertó la dirección, pero la potencia del lanzamiento no le dejó atajar.
Trilli: correcto mientras le duró la gasolina aunque no consiguió que evitáramos echar de menos a Alejo. Se sumó al ataque pero se quedó enganchado en el primer gol asturiano y evitó el fuera de juego.
Tomeo: desaparecido en combate. No brilló tanto como en otras ocasiones. Sin más.
Torres: ni él ni Tomeo pudieron evitar los goles. Sigue entonado y el derroche físico es su mejor virtud.
Guille Bueno: la lesión de Garri le devolvió la titularidad y aprovechó para hacer un partido correcto.
Juric: grave equivocación en el segundo gol del Sporting ya que quiso sacar la pelota jugada, la perdió y de ahí vino el penalti. El derroche de facultades está bien, pero el error grosero empaña su actuación. Se empeña en hacer cosas que no le corresponden.
Meseguer: más de lo mismo; desaparecido en combate; ni ataca ni defiende... pasan los minutos y apenas entra en juego. Intrascendente.
Biuk: intentó revolucionar el partido rompiendo en su banda y logró buenos recortes e incluso fabricó la jugada del gol de Peter Federico; aún así su peso específico debería ser mayor y ya si tirara a puerta cuando tiene hueco, pues mejor.
Chuki: terminó siendo sustituido. Lo intentó pero sin suerte. No consiguió entrar en juego y el equipo le echó de menos, pero no se le puede negar la intención.
Peter Federico: tal vez el mejor del partido y no solo por el gol. Quiso desbordar, se ofreció y estuvo atento al rechace en el gol. Mejorando poco a poco.
Latasa: está claro, no tiene gol y lo demuestra cada semana. Un delantero tiene que tener recursos y el gol como obsesión, pero el madrileño no tiene esa capacidad de revolverse en un palmo, reaccionar y marcar cualquier melón que le llegue. No es un ‘cazagoles’ y el equipo lo acusa. Fue sustituido con pitada general del estadio.
También jugaron en el equipo de Almada:
Ponceau: absolutamente intrascendente, salvo en el pase del gol a Delgado y eso que tuvo minutos ya que entró en el 60′ por Chuki.
Lachuer: salió en el 73′ por Trilli. Casi no entró en juego. Se espera mucho más de un jugador que está tardando en coger la forma. Veremos...
Jorge Delgado: salió en el 84′ por Latasa y aprovechó los 10 minutos que tuvo para convertir el 2-3 y dar alguna mínima esperanza de empatar.
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Marcos André: entró en el 60 por Meseguer. Parece que tiene más querencia al gol que Latasa pero no encontró el camino de la red. Poca cosa para más de media hora de partido.
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