Aprobados y suspensos del Almería: Baptistao se gana el puesto

Fernando: Su primera portería a cero refleja claramente cómo ha sido su partido. Un par de intervenciones bastante rutinarias y poco trabajo en general.

Pubill: Muy activo en ataque y muy atento en defensa. En numerosas ocasiones cerraba más el área para ayudar por el centro. Primer ladrillo del muro defensivo.

Chumi: Cortando y encimando a los atacantes del Mirandés. Pendiente de todo lo que pasaba a su alrededor. Notable alto, aunque no repetirá en Ferrol al ver la quinta amarilla. Segundo ladrillo del muro defensivo.

Edgar: Copió y pegó la actuación de su compañero de zaga. Menos rápido, pero igual de atento. Por arriba casi inexpugnable. Tercer ladrillo del muro.

Bruno Langa: Completó la cimentación de la muralla rojiblanca. Se desplegó en ataque y es posible que todavía esté agradeciendo a Baptistao la ayuda que recibió durante todo el partido por su costado. Cuarto ladrillo.

Arnau: Su discreto número de dorsal no hace justicia con su rendimiento. Si Arnau Puigmal no juega todos los días no será porque no lo merezca. Hoy volvió a ser el jugador perfecto para dar continuidad a la presión, a la ruptura por banda, a la recuperación en la trinchera enemiga y a defender los flancos propios.

Lopy: ‘Showman’. Que gane el Almería es la primera parte del espectáculo porque la segunda la pone el senegalés con sus celebraciones pospartido con la grada. Sólido, duro, con confianza. Es el único pivote que queda por las lesiones y ejerce de líder.

Melero: Si físicamente está bien, y lo está, es el jugador que necesita cualquier equipo. Si además muestra conciencia defensiva, se unen las piezas para completar el puzle perfecto. Le pitaron un penalti por tener el brazo pegado que el VAR tuvo que dejar sin efecto.

Baptistao: Si un delantero marca gol, es normal, pero si además ejerce como el mejor de los defensores, su valoración crece como la espuma. Ocupó el puesto de Melamed con brillantez y premió la decisión de Rubi de hacerle titular.

Arribas: Tuvo ocasión para marcar y Raúl Fernández lo evitó. Con cada partido, el canterano del Real Madrid se hace más grande. Mejor primera mitad que segunda cuando el equipo se hizo más tosco.

Luis Suárez: Lleva dos partidos ligueros sin marcar y no será porque no lo intenta. Ante el Mirandés quiso ser generoso, pero tardó un poquito más de la cuenta en elegir la opción correcta. Si las rachas son como las del máximo goleador, se puede vivir alguna semana sin celebrar sus goles.

Pozo: Entró por Arnau para doblar lateral por la derecha. Intentó desplegarse por su lado, pero tocaba más correr hacia atrás.

Nico Melamed: Rubi refrescó la mediapunta para dar descanso a Arribas. El catalán ingresó en un partido donde el último tercio no se pisaba mucho y por tanto el partido le daba pocas opciones.

Centelles: También dobló lateral por la izquierda para darle reposo al guerrero Baptistao. Pretendió dar trabajo al carrilero del Mirandés, pero no pudo lograr el objetivo

Radovanovic: Quitó balones donde no debía haber. Nunca un pelotazo fue tan bello.

Quintanilla: Se produjo su debut en Liga con el Almería.

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