Los resultados en Anduva no invitan al optimismo albinegro
En las tres visitas realizadas no se consiguió puntuar y se han recibido ocho goles, cuatro en el primer duelo.
En una situación complicada, uno siempre intenta amarrarse a cualquier estadística que le sea positiva. Pero en el caso del FC Cartagena, respecto del choque de esta jornada ante el CD Mirandés, es más que complicado. Y es que el cuadro albinegro, colista a siete puntos de la permanencia, visita Anduva, un estadio en el que no ha conseguido sumar ni un solo punto de los nueve que han estado en juego.
Con la urgencia de una victoria para intentar recortar distancias con los puestos de salvación, los pupilos de Julián Calero se medirán a un rival que les aventaja en ocho puntos y que en los últimos dos partidos ha logrado abrir una brecha de cuatro puntos respecto a la SD Amorebieta, equipo que a día de hoy marca el descenso. Por tanto, un empate, como ya ocurrió en Santo Domingo el pasado lunes, podría suponer un paso atrás en la lucha por salir cuanto antes de la zona roja.
La primera visita del FC Cartagena a Miranda tuvo lugar en la campaña 2020-21, con Borja Jiménez en el banquillo albinegro. Los locales vencieron de manera contundente (4-1) y bajo palos estaba el que hoy es uno de sus porteros, Raúl Lizoain. Curioso que el único superviviente de aquel choque en las filas albinegras es el otro cancerbero, Marc Martínez. En el siguiente compromiso, 21-22, derrota por 2-1, repitiendo Marc Martínez y jugando también Alfredo Ortuño. El central Pedro Alcalá estuvo en el banquillo. En el último duelo entre ambos en Anduva, 22-23, se repitió el resultado de la campaña anterior en un duelo marcado por la polémica por un penalti de Jairo. En este partido, además de Jairo, participaron Calero, Kiko Olivas, Mikel Rico y Ortuño, todos como titulares. Marc Martínez y David Ferreiro estuvieron en el banquillo.
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