TENERIFE
Aitor Sanz: “Lo del derbi es un golpe grande de moral”
El capitán del Tenerife pudo jugar su último clásico el sábado y sin demasiado tiempo para festejos ya mira para adelante. “No podemos recrearnos mucho porque el fútbol siempre exige”, avisó.
Aitor Sanz nació y se crió a las afueras de Madrid, pero ya es un tinerfeño más. Lleva diez años viviendo en la Isla donde es referente del vestuario y de la afición. El del sábado, eso sí, pudo haber sido su último derbi ya que termina contrato en junio. “He aprendido a no mirar más allá del siguiente partido. De nada sirve pensar en lo que sucederá a cuatro meses vista”, relató en sala de prensa.
El capitán ha sido testigo de triunfos épicos ante el eterno rival, como el 3-0 de 2013 o el reciente 4-1, pero él prefiere quedarse con otro: “Para mí el mejor fue el que ganamos en Gran Canaria en el Playoff. Ese fue espectacular”, corrigió. Han sido nada menos que 13 los duelos de rivalidad regional en los que ha participado, 12 de ellos como titular.
Con todavía el gusto alegre de la victoria pasada, Aitor ya prefiere mirar para adelante ya que les espera una salida complicada a Vitoria. “La alegría quedará y costará olvidarlo, pero tampoco podemos recrearnos en lo que pasó porque el fútbol te exige el máximo cada semana”, aseguró.
Desea, empero, que sea un punto de inflexión para este final de temporada. “Anímicamente es un golpe de moral grande”, admitió, “pero veníamos haciendo bien las cosas en partidos anteriores y hemos intentado mejorar cada semana. Ahora, queremos ser capaces de sacar los tres puntos en Mendizorroza”.
No será sencillo porque el madrileño considera al Deportivo Alavés “un equipo con gente rápida y jugadores importantes en la categoría. Un rival que se junta y parecido al nuestro en su manera de trabajar. Habrá que mantener la intensidad porque cuando un equipo está arriba, no suele tener resultados negativos consecutivos. Va a pelear por el ascenso directo ya que tiene grandes futbolistas”, aventuró.
Consultado sobre las opciones del Tenerife en lo que queda, fue cauto. “Vamos a intentar a ganar el próximo partido; y luego, a pensar en la siguiente semana. Si lo conseguimos en Vitoria, estaremos más cerca, pero si no lo hacemos, también estaremos más cerca de meternos en problemas”, opinó.