Adiós a una década de blanquiazul
Carlos Ruiz confirmó, mediante un emotivo vídeo, que no seguirá en el Tenerife el próximo año. El capitán está entre los diez jugadores con más partidos en la historia del club.
Carlos Ruiz Aranega (Baza, 1983) se despide del Tenerife. En un emotivo video publicado por el club en las redes sociales, el defensa anunció que no seguirá vistiendo la camiseta que ha defendido con honor durante la última década. Se marcha, así, una de los capitanes del conjunto blanquiazul que se ha metido entre los diez jugadores con más presencias en la historia de la entidad.
“He disfrutado mucho con los compañeros que he tenido a lo largo de toda esta etapa, pero sobre todo, he disfrutado tanto con este pedazo afición que tenemos y que tanto me ha dado. Ha llegado el momento de despedirme de nosotros”, exponía en futbolista. “Cuando llegué”, recordó, “algunos compañeros entre bromas me llamaban ‘godo’. Hoy siento que me marcho siento un tinerfeñista y birria más”, aseguró.
Seguramente el próximo sábado ante el Burgos tendrá la despedida que se merece en el Heliodoro, la que fue su casa todo este tiempo. Sin protagonismo en este tramo de competición, ya avisó Ramis que será una tarde-noche de emociones para los menos habituales. Podrá recibir y comprobar el central todo el cariño que le profesa su afición.
Carlos Ruiz llegó en el verano del 2013 procedente de la Ponferradina, de la mano de Quique Medina. Vino como mediocentro, pero se afianzó como central y fue allí donde jugó la mayoría de las veces. En total, acumula 285 partidos, entrando en el Top10 de jugadores con más encuentros en la historia blanquiazul. Se estrenó en Santo Domingo con derrota ante el Alcorcón (1-0), el 18 de agosto de 2013.
Sus estadísticas son muy equilibradas: ganó 100 veces, perdió 99 y empató las 86 restantes. Fue titular en 265 ocasiones -el 93% de sus encuentros-, anotó 17 goles -varios de ellos determinantes e inolvidables-, vio 77 amarillas y ocho veces fue expulsado. Hasta ahora, su última participación ha sido ante el Racing en Santander, en el mes de enero.
“Gracias por estos diez años inolvidables. Siempre los llevaré en mi corazón”, añadió Carlos en su mensaje final. Dejará huérfano el dorsal 14 que siempre lució desde su llegada. Se marcha como pocos, recibiendo el respeto y el cariño de la exigente grada chicharrera. Su compromiso, su entrega y su coraje por una camiseta no han pasado desapercibidos.