San Mamés desata la fiesta
El Athletic suma su primera victoria ante un Valencia con mucho atrevimiento que tuvo el empate por medio de Marcos André en el tramo final
Athletic y Valencia mostraron su nueva propuesta, la que van a proyectar en los estadios en esta temporada 2022-23, que tiene poco que ver con la del año pasado. Con sus armas, al equipo rojiblanco le dio para romper ese confort que estaban sintiendo los che en los últimos tiempos en el feudo bilbaíno. Pero tiene que hacer infinidad de remates para facturar un gol. Anota por abrasión en la portería contraria. Al Valencia se sirve para dar espectáculo, aunque le faltan muchos cañones para hacer agujeros en la meta rival. ¡Claro, ya no tiene la pegada de Guedes! Van a dar mucho juego este año estos guerrilleros de Gattuso, que juegan de cara y son muy osados. Eso sí, Simón casi ni intervino en la calurosa tarde bilbaína. Berenguer decidió con un zapatazo y Marcos André tuvo el empate en dos ocasiones claras en el tramo final, una de cabeza y otra por raso, pero la fortuna estaba del lado de los locales. La ciudad del Guggenheim está en fiestas y el fútbol se sumó al programa con el primer triunfo del equipo este curso.
San Mamés se hizo una ruta por la nostalgia, para recordar que nos hacemos mayores. Valverde y Gattuso esta vez paseaban por la banda, dando instrucciones. El Txingurri llegó a las victorias de Clemente como rojiblanco (141), por detrás de la leyenda Mr Pentland. Se acomodaban en la grada Braulio y Fran, dos muy buenos futbolistas ahora conocidos como los padres de los valencianistas Jesús Vázquez y Nico. Su tiempo de pantalón corto quedó atrás hace años. Y Muniain, un talento muy joven que ya ejerce de veterano, recogía le trofeo tras haber jugado la barbaridad de 500 partidos como león, cifra alcanzada en la jornada previa ante el Mallorca. Le acompañaron en la ceremonia dos históricos como Iribar y Susaeta, el anterior que llegó a ese medio millar de compromisos como rojiblanco. En el caso de los protagonistas actuales sobre el verde, lo de ahora, lo que está vigente, se consume con más agrado que lo ya pasado, lo descatalogado. Con Bordalás desterrado de ese Athletic-Valencia que es un clásico en la Liga, el encuentro de San Mamés alcanzó momentos deliciosos, vibrantes, sin andar a cada instante perdiendo tiempo ni malas caras. Al fin y al cabo, Bilbao está en fiestas y no es de recibo andar con asperezas ni fuera ni dentro de La Catedral.
El choque tuvo un ritmo trepidante. Gattuso no fue un violinista en sus tiempos de jugador precisamente, pero apadrina un grupo al que da gusto ver cómo acuna la pelota. Su equipo arriesga y tiene cinco jugadores por el frente ofensivo que son como avispas revoloteando a toda velocidad e intercambiando posiciones. Castillejo y Lino se meten hacia dentro y Hugo Duro no es un delantero estático, aunque cayó lesionado en el suspiro inicial cuando trató de salvar un balón en la banda a través de un taconazo. Salió Maxi Gómez en su lugar, un ‘nueve’ más fijo.
Iñaki Williams esta vez ofició de ‘nueve’. Los dos conjuntos trataban de imponerse con las armas de tres hombres talentosos por dentro, y ese debate derivó en una magnífica poesía futbolística, con transiciones ultrarrápidas y un balón en constante movimiento. Encontrar ocasiones de gol era solo cuestión de tiempo. La primera la tuvo Berenguer, tras gran recuperación de Vesga y pase muy bien filtrado por Muniain, pero el extremo lanzó la pelota al cuerpo de Mamardashvili. En el minuto 21 a Castillejo se le fue muy arriba el balón cerca del punto de penalti. Pudo resarcirse poco después, aunque en esta ocasión se marchó lamiendo el poste. Dos jugadas significativas: el Valencia fallaba por elegir lo sublime, por querer ajustar con el toque, nada de maltratar el cuero.
El pulso era apasionante, con mucha conexión entre los interiores. Al Athletic seguía presionando alto y moviendo rápido el balón para dar réplica a una disposición calcada por parte del cuadro che, aunque le faltaba el último toque para romper su sequía realizadora de este curso. El desgaste físico, aliado a una tarde tórrida, era descomunal; no había un instante para coger aliento, era un ida y vuelta constante. Allí nadie se reservaba nada en el almacén de la cautela. Todo se podía resolver por tantas virtudes acumuladas o por algún pecado. Lo cometió Soler en la salida del juego, en un pase de mucho riesgo y poco cálculo. Recuperó Iñaki y la pasó a Vesga, que se la dio servida en bandeja de oro a Berenguer. Este encaró a Paulista y lanzó de improviso un disparo seco que se fue a la red. Lo celebró con mucha rabia el navarro y pudo engordar su cuenta poco después, pero le negó el doblete Musah con el último instante.
La segunda parte fue hermana gemela de la primera en el origen. Pero luego los locales tuvieron más autocontrol y una superior vigilancia del enemigo. Los cambios rompieron un tanto el argumento de un partido con mucho que contar, aunque muchas de esas noticias se diluían al entrar en las áreas. Ante tanta actividad previa, el choque empezó a hacerse largo para los protagonistas desde el minuto 70. Se anuló el 2-0 en una confabulación de los Williams: Iñaki centro y remató tras recibir en fuera de juego Nico adelantándose a Foulquier. Cuando la lengua de casi todos iba por fuera por el cansancio, Williams dio su último esprín, pero no precisó bien su disparo para acallar cualquier emoción. A los leones les faltaba terminar las innumerables transiciones que desplegaban. Marcos André tuvo dos ocasiones inmejorables para el empate, que enmudecieron a La Catedral: un cabezazo y una internada rabiosa que envió el balón fuera por centímetros en el primer caso y al palo en el segundo. De todos modos, el destino había decidido que la victoria permanecía encerrada en el cofre de Valverde.
- 1 Unai Simón
- 5 Yeray
- 3 Daniel Vivian
- 17 Yuri
- 18 De Marcos
- 7 Berenguer (63')
- 11 Nico Williams (92')
- 6 Vesga
- 10 Muniain (72')
- 8 O. Sancet (72')
- 9 Williams (91')
- Banquillo
- 21 Capa (92') SC
- 2 Jon Morcillo (91') SC
- 15 Lekue
- 20 Villalibre
- 12 Guruzeta
- 23 Peru Nolaskoain
- 19 Oier Zarraga (63')
- 22 Raúl García (72')
- 16 Unai Vencedor (72')
- 35 Ander Iruarrizaga
- 14 Dani García
- 31 Aitor Paredes
- 25 Mamardashvili
- 2 Thierry Correia (74')
- 5 Gabriel Paulista
- 21 Vazquez Alcalde (61')
- 12 Mouctar Diakhaby
- 10 Carlos Soler
- 4 Yunus Musah (61')
- 6 Hugo Guillamón (74')
- 16 Samuel Lino
- 19 Hugo Duro (16') SC
- 11 Samu Castillejo
- Banquillo
- 8 Uros Racic
- 22 Marcos André (74')
- 13 Cristian Rivero
- 20 Foulquier (74')
- 1 Jaume
- 17 Nico González (61')
- 29 Francisco Martinez
- 18 Koba Koindredi
- 9 Maxi Gómez (16')
- 33 Cristhian Ibarguen
- 3 Lato (61')
- 21 Manu Vallejo
Cambios
Maximiliano Gómez (16', Hugo Duro), Nico González (61', Yunus Musah), Toni Lato (61', Jesús Vázquez), Oier Zarraga (63', Alex Berenguer), Raúl García (72', Iker Muniain), Unai Vencedor (72', Oihan Sancet), Dimitri Foulquier (74', Thierry Correia), Marcos André (74', Hugo Guillamón), Jon Morcillo (91', Iñaki Williams), Ander Capa (92', Nico Williams)
Goles
1-0, 42': Berenguer
Tarjetas
Arbitro: César Soto Grado
Arbitro VAR: David Medié Jiménez, Santiago Jaime Latre
Daniel Vivian (12',Amarilla) Yunus Musah (22',Amarilla) Muniain (67',Amarilla) Mouctar Diakhaby (73',Amarilla) Unai Simón (78',Amarilla) Yuri (85',Amarilla) Yeray (87',Amarilla)