Real y Rayo empatan a sensaciones

Real Sociedad y Rayo Vallecano empataron a sensaciones en el amistoso de urgencia que disputaron en el Reale Arena. Un partido que se jugó por la negativa a última hora del Anderlecht a viajar San Sebastián por la muchas lesiones que sufre. Los vallecanos echaron una mano a los donostiarras, que estaban sin rival para su primer partido de preparación. Y entre ambos lograron componer un encuentro interesante, que sirvió para que tanto Imanol Alguacil como Andoni Irarola sacaran conclusiones de cara al futuro, cuando las competiciones de clubes se reanuden tras el Mundial de Qatar. Se puede decir que los dos equipos dejaron detalles esperanzadores para fechas venideras, con una parte para cada uno. La primera fue más del Rayo, aunque marcara primero la Real. La segunda fue más de color azul y blanco, aunque la última ocasión clara del partido corriera a cargo de los madrileños.

Marcaron Sorloth y Nteka, ambos antes del descanso. Y pudo ganar cualquiera. Estuvo entretenido el partido, a pesar de que la hora no ayudara a que hubiera ambiente en la grada del Reale Arena. Lo más preocupante fue la nueva lesión de Carlos Fernández, que apenas duró 25 minutos sobre el césped, porque pidió el cambio con molestias musculares. El sevillano no termina de tener suerte, parece que le han echado un mal de ojo. Y volvieron, tras sus largas lesiones, Mohamed Ali Cho, y el potrillo Ander Martín.

En la primera parte, fue la Real Sociedad la que tuvo el mando de las operaciones, pero fue el Rayo Vallecano el que dispuso de las mejores ocasiones, al menos generó más peligro sobre la portería realista. Aunque fueron los de Imanol los que golpearon primero, con un centro lateral desde la derecha de Alex Sola que cazó de manera poco ortodoxa Alexander Sorloth para batir por bajo dentro del área a Diego López. La defensa vallecana estuvo muy blanda, el portero no fue capaz de imponerse, y entre su falta de entendimiento se coló el delantero noruego, que volvió a jugar con la Real en el mismo punto en el que lo dejó: viendo puerta con relativa facilidad.

La Real tenía más la pelota, pero aparte de la jugada del tanto de Sorloth, no era capaz de dar más sustos a un Rayo Vallecano que fue creciendo con el paso de los minutos. Primero le quitó el balón a la Real. Y luego merodeó más la portería defendida en ese primer tiempo por Zubiaurre. Iraola puso en liza a alguno de los menos habituales, con RDT otra vez teniendo su oportunidad como referencia atacante. El delantero madrileño debe ir cogiendo los automatismo del equipo de vallecas, y eso se logra con minutos de juego, aparte de entrenamientos, claro. Aunque el jugador que más peligro generó fue Nteka, con sus llegadas de la segunda línea. Un desmarque suyo acabó con un disparo de Oscar que acabó pegando en el palo. El Rayo merodeaba para entonces el empate. Isi avisó con un central lateral que despejó con apuros Zubiaurre. Pero en la siguiente jugada, el portero realista no fue capaz de atajar un disparo desde la frontal y el rechace lo cazó en el área pequeña Nteka para poner el 1-1. Para entonces, a la Real le duraba poco la posesión, y sus acercamientos a la portería De Diego López se limitaba a buenas presiones para salir rápido, con un disparo lejano de Mikel Merino y una falta desde la frontal de Brais Méndez que rondaron la portería del Rayo. Así se llegó al descanso.

En la segunda mitad, con los cambios, la Real pareció coger aire y salió con otros bríos. Mucho más dinámica y más intensa en sus acciones. Hasta el punto de que de entrada fue capaz de volver a encerrar en su campo a un Rayo sobrepasado e incapaz de llegar a la portería ya defendida entonces por Alex Remiro. La movilidad de Mohamed Ali Cho, que volvía a jugar tras su lesión en octubre, y de Carlos Fernández, recuperado de sus molestias musculares en Si Sevilla natal en el último partido liguero, dieron aires renovados a la Real. Bien secundados, eso sí, por David Silva y Robert Navarro, que pusieron picante a los últimos metros del juego de la Real, todo lo que le había falta en la primera mitad. Así llegaron las primeras ocasiones realistas para intentar desnivelar el marcador, especialmente un remate de Navarro en boca de gol después de un buen centro de Cho desde la izquierda. Al Rayo le costó más de 20 minutos llegar con peligro al área realista, con una jugada comandada por Isi que acabó en saque de esquina. Fue justo antes del carrusel de cambios que había preparado Iraola. Fue también cuando pidió el cambio Carlos Fernández, que apenas estuvo 25 minutos sobre el terreno de juego, para entrar al joven Magunazelaia, cada vez más cerca del primer equipo por méritos propios. El sevillano se marchó del terreno de juego con molestias en el muslo de su pierna izquierda. Sin duda, preocupante.

Los cambios le vinieron bien al Rayo, que empezó a estirarse y quitarse de encima la presión asfixiante que hasta entonces había ejercido con acierto la Real. Pozo, Bebe, Unai López y Saveljich tuvieron su oportunidad. Aún así, los txuri-urdin seguían generando más peligro gracias a la magia de Silva y a la buena labor de Guevara, que sustituyó a un buen Zubimendi en el primer tiempo. Entre ambos lanzaban a un acertado e hiperactivo Cho, que era capaz de encontrarse con Navarro y conectar con Magunazelaia, que lamentablemente también lesionado no pudo durar mucho el terreno de juego. Fue el turno para que otro delantero de Zubieta tuviera minutos, Jorge Aguirre. El joven potrillo, que ya sabe lo que es marcar con el primer equipo (lo hizo en el amistoso de verano contra el Alavés) tuvo tiempo de robar un balón dentro del área y servir a David Silva, pero el disparo seco y duro del canario se marchaba rozando al poste derecho de la portería de Diego López cuando tenía todo a su favor. Fue la ocasión más clara de la Real para haberse llevado el amistoso contra un Rayo que aún tuvo tiempo tener su opción de ganar con un tremendo disparo desde la izquierda de Bebé ante el que reaccionó de manera brillante Alex Remiro con una mano salvadora, enviando el balón al larguero.