Laporta: “Volveremos más fuertes que nunca”
El Barça entierra sus recuerdos en el Camp Nou y el presidente pone la primera piedra de su “nuevo templo”. “Convertiremos este estadio en el más cómodo y el mejor del mundo”, dijo Laporta.
El Barça enterró este lunes sus recuerdos más íntimos en el Camp Nou. Los periódicos que han contado sus hazañas (colocados por Asensi), la camiseta (depositada por Xavi), el brazalete (Busquets), el balón (Melanie Serrano), las botas (puestas por Jana y Guiu, jugadora y jugador de los infantiles A y B respectivamente) y, finalmente, las banderas del Barça y la Senyera, enterradas por el presidente, Joan Laporta. Paladas que ya son historia, pero que abren una nueva etapa en el Barça 66 años después de la inauguración de un estadio que dice hasta luego, pero que no se mueve de sitio.
“Me gustaría decir que estos 123 años de historia del Barça se podrían explicar de muchas maneras, y una de esas formas de explicarlos sería a través de los estadios donde hemos jugado. Desde los principios, en los que jugamos de manera itinerante en varios estadios, hasta Les Corts, que estaba bien cerca hasta de este maravilloso estadio. Cuando se inauguró este campo, el Barça ya era una referencia mundial y, desde entonces, ha sido nuestra casa, nuestro fortín, nuestro templo. Y también el orgullo de los barcelonistas. Y queremos que siga siendo nuestra casa y nuestro templo. Y lo queremos en el mismo sitio. Por eso ponemos la primera piedra aquí, en el barrio de Les Corts, que es donde el Barça ha vivido en 1922. Y queremos que sea en la ciudad, dentro de Barcelona, que es nuestra casa”, empezó su discurso Laporta en un acto lleno de representación del club, pero también de la constructora Limak (con su presidente de honor y fundador, Nihat Özdemir, a la cabeza) y a los inversores que han prestado 1.450 millones al club a través de un crédito para poner en pie la joya del Espai Barça.
“Este estadio hará realidad un sueño colectivo del barcelonismo y será un legado para nuestros hijos y nuestros nietos. Y, primero, debe pasar por un proceso de construcción que hemos de vivir con una máxima ilusión. Porque volveremos a estar aquí, y volveremos más fuertes que nunca. Queremos que siga siendo el escenario de jornadas gloriosas, coincidiendo con el 125 aniversario de nuestro club. Tenemos previsto volver en noviembre de 2024. Entonces, estará en condiciones aptas para sacer el rendimiento que queremos sacarle al estadio y esté acorde a las necesidades que tiene nuestro estadio”, continuó Laporta, que luego se dirigió en inglés a los representantes de la constructora Limak y a los inversores: “Estamos seguros de vuestro compromiso. Este club ya es vuestro club. Gracias por confiar en el Barça. Juntos haremos del Camp Nou el estadio más seguro, más cómodo, más comercial y más excitante del mundo. Juntos haremos el mejor estadio del mundo”. Y se despidió así: “El Camp Nou ya es pasado, un recuerdo. Pero lo más importante, sin duda, es el futuro, esplendoroso futuro, acorde con nuestro historia”.