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REAL MADRID

Vinicius, una noche perfecta

Participó en los cuatro goles y tiranizó la estadística: el que más remató, ocasiones creó y regateó. Indirecta de Ancelotti: “Es el mejor del mundo... cuando está con esta actitud”.

MadridActualizado a
Vinicius, una noche perfecta
DANI SANCHEZDiarioAS

En el Bernabéu cantarán Taylor Swift, Aitana y Duki... pero ya baila Vinicius. Y de qué manera. Ante el Girona ofreció un recital en toda regla; uno de sus mejores partidos, al menos a nivel estadístico, con la camiseta del Real Madrid. Fue perfecto. Impulsor del vendaval y prueba inequívoca de que está empezando a dominar la lectura de los partidos, uno de los secretos de su reciente mejoría. Si ante el Barcelona –en la Supercopa– detectó que el camino era atacar el espacio entre el central y el lateral, frente al Girona su electricidad circuló más pegada a la banda. Desde ahí, se convirtió en una pesadilla para Yan Couto. Y un sueño para el madridismo. Firmó una noche sublime.

Números, que con ellos todo parece más sencillo. Para empezar, Vinicius fue el futbolista que más veces remató (empatado con Bellingham), disparando hasta cuatro veces a la portería de Gazzaniga. Tres de ellos fueron entre palos, dos detenidos por el portero y uno, a la jaula. Este, espectacular: un derechazo desde la frontal al palo largo (“no suelo pegarle desde fuera del área, pero esta vez me sentí con confianza”, confesó a pie de campo), absolutamente imparable. Su 12º esta temporada, quedándose a uno de Joselu y Rodrygo, actuales segundos máximos goleadores del equipo (los 20 de Bellingham son otra galaxia).

Vinicius baila, tras marcarle al Girona.
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Vinicius baila, tras marcarle al Girona.Daniel GonzalezEFE

No queda ahí. Vini fue el que más ocasiones creó (tres) y el que más regateó (cinco exitosos). Evadió las piernas de los rivales y firmó un dato singular: terminó el partido sin sufrir una sola falta, tema que llegó a estar al rojo vivo hace algunos meses. Sólo había pasado cinco veces en todo el curso, mirando partidos en los que fue titular: los dos del Braga, Osasuna, Celta y Las Palmas.

Halago a Bellingham...

Participó en los cuatro goles del equipo: gol en el primero, asistencia a lo Modric para Bellingham en el segundo, disparo que provoca el rechace del tercero y recuperación en el último. Fue omnipresente y confirmó que su sociedad con Jude es ilimitada: “Entrenamos todos los días juntos y nos vamos conociendo. Es un crack. De hecho, está siendo el mejor esta temporada y nos alegramos mucho, porque somos como una familia. Este vestuario está más unido que nunca”.

Vinicius y Bellingham celebran ante el Girona.
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Vinicius y Bellingham celebran ante el Girona.OSCAR DEL POZOAFP

...e indirecta de Ancelotti

La noche acabó con Ancelotti hablando sin tapujos en rueda de prensa: “Cuando juega de esta manera y con esta actitud... es el mejor jugador del mundo, en mi opinión”. Ahí va el tirón de orejas: “Con esta actitud”. Centrado en el fútbol, en exprimir al máximo su enorme talento, olvidándose de rivales, árbitros y aficiones. Esa tarea que durante años Ancelotti ha tratado de pulir, pidiéndole cabeza y fútbol. Deslizando desde que no le gustan los tacones cuando no tocan, como que las protestas no le llevan a ningún lado. Como el Dr Jekyll and Mr Hyde, Vinicius tiene dos versiones. Y esta, la que piensa sólo en el fútbol, para Ancelotti es la que le lleva a ser el mejor jugador del mundo. A regalar noches perfectas.