Vinicius reparte alegrías
Otras dos asistencias de Vinicius, que ya lleva seis este curso. Ancelotti lo celebra y señala la siguiente mejora que necesita el brasileño para seguir evolucionando.
El nuevo Vinicius, el que vio la luz en la temporada 2021-22 y cuya luz sigue brillando con fuerza en la 2022-23, no es sólo regate y gol. A la primera versión del brasileño, la que se vio entre los veranos de 2018 y 2021, le sobraba desparpajo y velocidad, pero el área era para él una nebulosa confusa, más y más espesa según se acercaba a la red rival. Con Ancelotti resolvió sus traumas con el remate (22 goles en la 2021-22, ya lleva 7 este curso) y, de paso, afiló aún más otra de sus grandes cualidades: la de asistir.
Contra el Sevilla anduvo obtuso en la finalización, firmando un remate entre palos y dos fuera de ellos. Sin embargo, cubrió perfectamente el expediente, en un día en el que además no estaba Benzema para encender la luz de los blancos en los momentos de oscuridad ofensiva, con las asistencias de los dos primeros goles del Madrid. La primera contenía trazas de aquellas que soltaba Guti en ese mismo césped: donde nadie esperaba el balón, viendo la llegada de Modric desde atrás. La segunda, mucho más académica para que anotase el 2-1 Lucas Vázquez, resaltó su generosidad. Ante el Sevilla, Vinicius fue un repartidor de alegrías.
Y nadie más alegre que Ancelotti, que en sus años de centrocampista algo sabía del placer que provoca dar un gol en bandeja: “Quiero destacar lo que ha hecho Vinicius, dando dos asistencias para que marcasen sus compañeros a portería vacía. Eso significa mucho más que un gol y se lo he dicho, que tiene que irse aún más feliz. Demuestra una humildad muy grande”. Aun así, el italiano, en su permanente papel de mentor, cree que el margen de mejora para Vinicius aún existe y que radica, principalmente, en mejorar su resistencia: “Está a un nivel muy alto y necesita continuidad, pero no es fácil, porque encarar desgasta mucha energía. Para progresar, debe trabajar esto”.
De lo que quedan pocas dudas es de que, en ausencia de Benzema (el francés, con molestias, no viajará a Leipzig), la importancia de Vinicius en ataque cobra aún más relevancia. Es, junto a Valverde, el máximo artillero del equipo (ambos llevan siete goles). A ello suma seis asistencias y participa en una diana del Madrid cada 103 minutos. Números prácticamente calcados a los del curso pasado: 22 goles y 20 asistencias en 4.274 minutos, participando en un tanto cada 102 minutos. Está clavando sus estadísticas de la campaña pasada: a este ritmo, acabaría con 22 goles y 20 asistencias en 52 partidos. Vini los marca y los reparte, y Ancelotti sonríe desde la banda.