CASO NEGREIRA
Una testigo vio a Bartomeu en las oficinas de la empresa de Negreira
Según publica El Confidencial, la secretaria del exvicepresidente del CTA explicó a la Policía que los ‘negocios’ con el Barcelona partió de su “relación personal” con los presidentes del club.
El ‘caso Negreira’ va a capítulo por día. Hoy El Confidencial publica que una testigo aseguró haber visto al expresidente del Barça, Josep Maria Bartomeu, en la oficina de la empresa de José Enríquez Negreira. La secretaria del exárbitro ofreció a la Fiscalía detalles concretos de la conexión profesional que mantenía su jefe con el FC Barcelona y apuntó a sus presidentes. En una declaración prestada ante la Policía, Concepción Díaz, empleada de Negreira durante más de 20 años, explicó que el trampolín que le permitió cobrar del FC Barcelona más de 7,5 millones partió de su “relación personal” con los sucesivos máximos dirigentes del club. “El señor Bartomeu estuvo en una ocasión en el despacho hablando de fútbol”, dijo. Bartomeu, por su parte, negó conocer personalmente a Negreira.
Díaz, como única empleada de la empresa de Negreira que centralizó la mayoría de los pagos (Dasnil), conocía al detalle el funcionamiento de la compañía. Cuenta el Confidencial, que cuando llegó el fin de la relación con el Barça, Díaz fue despedida. “Dejó de tener como cliente al Barcelona y los ingresos descendieron al menos en un 70%”, explicó, para detallar más adelante que en su carta de despido en 2018 constaba como motivo esa pérdida de ingresos. Llevaba trabajando con el exvicepresidente del CTA desde 1995.
La secretaria desconocía a qué obedecían esos pagos que se sucedieron durante años. Explicó que la última factura que pagó el club se emitió en el mes de junio de 2018, “prácticamente al mismo mes que cesó como vicepresidente del CTA”. “La factura correspondiente al mes de julio de ese mismo año les fue devuelta con un correo en que les decían que la anularan, ya que prescindían de los servicios de la empresa”. Negreira trató de contactar con Bartomeu, pero este nunca volvió a devolverle una llamada, describió.
Díaz se limitaba a facturar lo que Negreira le decía y remitir después un correo electrónico a FC Barcelona en el que se detallaba el número de cuenta al que tenían que hacer la transferencia. Solo remitió facturas, nunca otro tipo de documentos o archivos. “¿En alguna ocasión vio que el señor Enríquez trabajara sobre la confección de algún informe o sobre la grabación de algún disco?”, preguntaron los agentes. “No”, fue su respuesta rotunda. No supo explicar las cantidades millonarias ingresadas por su jefe que volvió a atribuir a “una relación personal con el presidente que hubiera en el momento”.