Una ‘pretemporada’ exprés
Ounahi, Vanat y Livakovic vivirán esta semana sus primeros entrenamientos con el Girona. El domingo debutarán contra el Celta.
Este miércoles al mediodía se tenía todo preparado para la rueda de prensa del director deportivo del Girona, Quique Cárcel, para hacer balance a lo que dio de sí el mercado de fichajes de verano, pero finalmente quedó pospuesta por indisposición. Cárcel sufre desde hace días una infección en el oído que le provocó un mareo en los minutos previos a atender a los medios de comunicación en Montilivi y de ahí su cancelación. Se realizará otro día, pero, sin duda, uno de los temas a tratar iban a ser las últimas incorporaciones: Ounahi, Vanat y Livakovic.
Los tres serán protagonistas en las próximas horas porque regresarán a Girona tras sus compromisos internacionales y, por fin, podrán ponerse bajo las órdenes de Míchel Sánchez. Ounahi, antes de irse con Marruecos, sí realizó una jornada de entrenamiento con los que son sus nuevos compañeros, pero tanto Vanat como Livakovic no han pisado la Ciudad Deportiva gerundense. El delantero ucraniano, tras ver el partido de Liga ante el Sevilla, firmar su nuevo contrato y realizarse fotografías con la camiseta rojiblanca en Montilivi, se concentró con su selección. Y Livakovic ni pisó Girona. Recibió toda la documentación por vía telemática, la firmó y, este miércoles, tras estar con Croacia aterrizó en Girona por primera vez.
Lo que van a vivir Ounahi, Vanat y Livakovic será una pretemporada exprés porque la idea de Míchel es citarles para el encuentro del domingo ante el Celta y hacerles debutar. Pueden ofrecer rendimiento inmediato porque vienen rodados tras contar con minutos con sus respectivas selecciones.
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Lo cierto es que los parones de Liga acostumbran a ser bendecidos por aquellos entrenadores que ven cómo sus equipos aún no carburan y por los que los fichajes de verano les llegaron tarde. En el Girona tienen el dos de dos y Míchel lo está ‘sufriendo’. Ahora le va a tocar correr a él y a Ounahi, Vanat y Livakovic. En las próximas horas todos se ejercitarán con normalidad sus compañeros y tratarán de adquirir los máximos conceptos posibles. Si algo tiene el fútbol es que no espera a nadie y en el Girona, además, tienen prisa. Se trabajará a contrarreloj porque el domingo toca visitar al Celta y urge empezar a puntuar. De momento, los rojiblancos solo conocen la derrota esta Liga.
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