Un partido de 272.000 minutos
Conquistó el Espanyol su primera victoria en el RCDE Stadium desde el 10 de abril, con solo cinco repetidores. “La afición estuvo espectacular”, destaca Calero, tras la comunión final.
Hay partidos que duran 90 minutos, más el añadido, otros tipo eliminatorias o finales que se alargan hasta los 120, e incluso los hay que culminan en interminables tandas de penalti. Pero ninguno que haya durado 272.000 minutos, los más de seis meses, 27 semanas y 189 días que habían transcurrido desde la última victoria del Espanyol en el RCDE Stadium hasta el reencuentro triunfal del equipo perico ante su afición, este domingo frente al Valladolid (1-0).
“Era un día muy bonito para conseguir la primera victoria en casa”, proclama en los medios del club el artífice de estos tres valiosísimos puntos, Joselu Mato, quien junto a sus compañeros los celebraba ante la grada de animación casi como de si un título se tratase, en una perfecta simbiosis. “La afición estuvo espectacular, tenía las mismas ganas que nosotros de conseguir la victoria”, destaca en ese sentido Fernando Calero, quien considera que “en varios partidos habíamos estado a punto, pero por grandes errores nuestros no lo conseguimos, y en cuanto conseguimos solucionar eso la victoria es nuestra”.
Del 10 de abril, en un Espanyol-Celta con la permanencia virtual como épico desenlace, más por el minuto del 1-0 definitivo de Wu Lei, el 88′, que por la situación en la tabla, databa ese anterior triunfo. De aquel encuentro, con un entrenador distinto, Vicente Moreno, solo repetían este domingo cinco titulares: Óscar Gil, Calero, Leandro Cabrera, Sergi Darder y Javi Puado. Y en estas 272.000 horas, además de un verano, han pasado ocho partidos.
En el tramo final del último curso desfilaron por Cornellà Rayo Vallecano (0-1), Osasuna (1-1) y Valencia (1-1). Y este curso, ya con Diego Martínez en el banquillo, se habían ido con puntos Rayo (0-2), Real Madrid (1-3), Sevilla (2-3) y Valencia (2-2). Cuatro empates y cuatro derrotas del Espanyol, o lo que es lo mismo, siete goles a favor y 14 recibidos.
“Le dedico los tres puntos a la afición. Siempre nos han estado apoyando. Hay momentos en que se ponen las cosas difíciles, pero que estén ahí es importante para nosotros”, pone en valor Javi Puado. “Agradecemos que no hayan perdido la fe desde el primer día”, añade Joselu. Y concluye Calero, con la vista puesta ya en la visita de este jueves a Osasuna, en El Sadar: “Es un campo complicado pero vamos con todo, esto nos va a dar una inyección de moral”.