Un Gran Canaria de ‘reboso’
Entrada histórica de 31.712, que queda menos de ochenta espectadores de la que se vivió ante el Alavés en el que se consumó el ascenso.
El encuentro de este jueves entre Las Palmas y el Barcelona, fue la cuarta vez que los blaugranas visitaban el Estadio de Gran Canaria desde su inauguración del ocho de mayo de 2003, hace más de 20 años. Anteriormente los blaugranas fueron unos de los habituales del coso amarillo del barrio de Las Alcaravarenas. Hasta en 31 ocasiones en liga se desplazaron los culés al vetusto estadio Insular para medirse con los canarios.
Estas tres visitas previas al Gran Canaria por parte de los blaugranas, no se llegaron a colar entre las grandes asistencias de la reciente historia del estadio amarillo. Con capacidad para 32.400 espectadores en la serie de tres encuentros que disputaron en el paso anterior por Primera División del club de Pío XII los culés congregaron como máximo 26.817, en la primera temporada tras el ascenso del año 2015. Al año siguiente se bajó hasta los 23.778 y en el curso que se consumó el descenso la afluencia cayó a los 22.268.
Aquel año, el de menor asistencia en marzo de 2018, con un equipo proa al marisco, fue curiosamente el único encuentro que Las Palmas fue capaz de rascarle algo al Barcelona durante esas tres temporadas. Ese campeonato se lo acabaría llevando los blaugranas con más 93 puntos.
Así pues, con los 31.712 asistentes a este recién jugado Las Palmas-Barcelona el club insular se quitó una espina, la de mostrar sus mejores galas en una de las grandes citas del año. Además, se convierte no solo en el encuentro de mayor asistencia ante los culés sino que se queda a 80 personas de superar la entrada contra el Alavés y máximo de la historia en Primera. La única de las secciones del estadio que no presentó un aspecto repleto fue la zona reservada a la afición rival. De haber presentado un grupo como el que trajo el Atlético de Madrid, a buen seguro se hubiera batido el récord histórico, sin contar la jornada de puertas abiertas ante el Rayo Vallecano de la temporada 2005-06 en Segunda B.
Asimismo, cabe reseñar que este encuentro fue declarado día del Club y ya se preveía la gran afluencia en tanto en cuanto, las entradas disponibles para no abonados se agotaron hace casi un mes. Aunque posteriormente quedaron liberadas aquellas que no fueron retiradas por los abonados antes del 16 de diciembre. Por lo que no solo se llenó el Estadio de Gran Canaria, sino que ayudó también a la cuenta de resultados con un ticketing de récord.
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