LALIGA
Un error garrafal pone al VAR en el ojo del huracán
El Cádiz-Elche aviva una tormenta de críticas hacia el colectivo arbitral tras un mes repleto de polémicas por las manos, los penaltitos, el videoarbitraje...
No hay descanso para los árbitros. La polémica vuelve a salpicarles y en especial al VAR. Un error garrafal de Iglesias Villanueva y Díaz de Mera en el VOR del Cádiz-Elche, al no ver un fuera de juego en el gol del empate ilicitano, agita la tempestad contra el colectivo. “Nosotros no somos nadie, los pequeños seguimos sufriendo...Menos Supercopa en Arabia y más arreglar el VAR” , afirmó tajantemente Manuel Vizcaíno, presidente del club gaditano, tras el partido. Esta es una más de las múltiples críticas que recibe el estamento presidido por Medina Cantalejo en los últimos meses: la actuación de Mateu Lahoz en el derbi catalán que le ha llevado a la nevera, las manos del Villarreal-Real Madrid o penaltitos como el del Real Sociedad-Athletic.
Está siendo un mes complicado para el CTA. Pese a que salieron a defenderse durante la Supercopa de España, las actuaciones en Liga han creado muchas suspicacias y críticas. La última ha sido la del Nuevo Mirandilla. El Elche logró empatar el partido con un gol de Ponce que venía precedido por un fuera de juego que inexplicablemente los dos árbitros de VAR no vieron. El error más grave de la historia del videoarbitraje en España. No hay defensa posible y por ello el castigo ha sido inmediato. Medina Cantalejo ha tirado de neverazo inmediato. En vez de esperarse a las siguientes designaciones para castigarles sin pitar (como es habitual) el castigo lo ha hecho más notorio todavía rehaciendo los nombramientos para los octavos de Copa del Rey que arrancan este martes. Iglesias Villanueva, principal señalado, se queda sin estar en el VOR del Levante-Atlético y Díaz de Mera, que tenía el premio de pitar uno de los partidos más relevantes de esta eliminatoria como es el Villarreal-Real Madrid, también ha sido apartado. Queda por ver cuánto dura el castigo para el mayor error de los últimos tiempos.
A esto hay que añadirle otra polémica este fin de semana que cabreó al Athletic. Cuadra Fernández pitó penalti de Yeray sobre Kubo. Hubo doble castigo, pena máxima y expulsión para el jugador rojillo por una acción ligerísima. Un penaltito. Acciones que el presidente de los árbitros dijo que no había que pitar a principio de temporada. Cuadra Fernández, sobre el césped lo señaló, pero Medié Jiménez desde el VAR no le rectificó. “Para mí no es penalti, hay un ligero contacto exagerado por Kubo. El VAR debería haber entrado”, sentenció el exárbitro internacional Iturralde González. A esta polémica le precede otra de la jornada anterior. En el Villarreal-Real Madrid hubo revuelo por dos manos. Para Iturralde no hubo pena máxima en ninguna de los dos lances. La primera llega de un forcejeó en carrera entre Foyth y Vinicius. El balón cae en picado hacia la mano del defensa del Villarreal, que la tenía extendida y el VAR avisa de la acción. Mano extendida ocupando un espacio antinatural. Aunque más polémica (y menos punible) generó la de Alaba. El jugador del Real Madrid se trastabilló y se iba al suelo, se apoyó en el suelo y trató de recuperar la verticalidad. Justo en el momento que recuperaba la compostura el balón impacto en su brazo, que no suponía una posición antinatural excesiva y estaba en correlación al movimiento realizado. Soto Grado señaló esa mano polémica, pero Iglesias Villanueva no le rectificó. Acciones puntuales, que como diría Vizcaíno anoche sobre el fuera de juego, son decisivas: “Esos dos puntos ya no nos los va a devolver nadie. Si descendemos por dos puntos, luego se cantará ‘Vizcaíno dimisión’ y nadie se acordará de esto”. Algo que puede suceder o al revés. El VAR te puede condenar o salvar, como también le pasó al Cádiz en la última jornada de LaLiga pasada cuando avisó para anular un penalti del Alavés que mantuvo a los gaditanos en Primera.
Ahora bien, no siempre todas las polémicas son por errores de los árbitros, sino por aciertos. Algo que tiene cabreado al colectivo y así lo hicieron ver en la última rueda de prensa. Medina Cantalejo mostró su disgusto de que se ponga en tela de juicio el criterio de los árbitros para señalar ciertas manos cuando esas mismas acciones les han sido explicadas a los futbolistas en agosto. Un ejemplo fue la mano de Asensio a principio de temporada ante el Girona. Se creó revuelvo porque se consideró que no era punible, pero la indicación que se dio en verano tanto a árbitros como a clubes era claro: se considera infracción cuando el balón llega rebotado de tu propio cuerpo pero el brazo, anteriormente, ya estaba en posición antirreglamentaria.
Entre decisiones que sí son errores, y que el CTA defiende que son muy pocas a lo largo de la temporada, y las acertadas que no se contemplan como tal por desconocimiento de las reglas por parte de los futbolistas, los árbitros siguen en el ojo del huracán un año más. Y esto ha creado también cruces de declaraciones entre LaLiga y el Comité de Árbitros. Javier Tebas, presidente de la patronal, afirmó recientemente que ya no sabe “qué es mano y qué no” y propuso un grupo reducido de árbitros especialistas de VAR. Medina Cantalejo le contestó tajantemente al día siguiente: “Que un aficionado tenga dudas, lo puedo entender. Pero el presidente de LaLiga no puede tener dudas”. Además de apuntar que ya cuentan con ese cuerpo especializado de VAR. Algo en lo que lleva razón el colectivo arbitral, ya que ese cuerpo de élite lleva funcionando varias temporadas en LaLiga. Se ha ido creando a partir de los árbitros que han ido colgando el silbato (como el internacional Estrada Fernández o González González), pero también con otros que en su momento se les decidió descenderles de Primera y estos optaron por retirarse y dedicarse exclusivamente al VAR. Como sería el caso de trencillas como Iglesias Villanueva y Medié Jiménez. Los mismos árbitros especialistas de VAR que han estado presentes justamente en polémicas como las del Elche-Cádiz y Villarreal-Real Madrid, en el caso del gallego, y del Real Sociedad-Athletic, en el caso del trencilla catalán.
Para que el error del Cádiz-Elche no se vuelva a repetir, el colectivo arbitral y la Federación lanzan una propuesta a los clubes y la propia Liga: “Acabar con el error humano no es posible, pero sí lo es en el fuera de juego si se aplica la herramienta del semiautomático”. Es decir, piden implantar esta herramienta para que este error no vuelva a suceder. LaLiga y la RFEF, que siempre están enfrentadas, podrían acordar la implantación de esta tecnología. Es más, según ha podido saber AS, ambas instituciones ya han iniciado las conversaciones para renovar el convenio arbitral que caduca este verano y las dos partes no creen que surja ningún problema para alcanzar un acuerdo. Y es en el marco de estas conversaciones donde se espera que también se logre la implantación de esta nueva herramienta. De ahí que la RFEF invite públicamente a la patronal a reanudar las conversaciones para tratar un asunto que podría acabar con las críticas y ayudar a evitar errores con una herramienta que también agilizaría el juego (menos tiempo de revisión de las jugadas). Ahora LaLiga y los clubes, que son los que pagan y se han quejado de estos errores arbitrales, son los que tienen que dar el paso para implantar esta tecnología. Todo apunta que lo harán, pero en el paso declinaron hacerlo por el Ojo de Halcón argumentando que con el VAR se resolvía 9 de cada 10 casos. Aunque ese caso que queda en duda puede decidir una Liga.