Tres cambios mermantes y uno más condicionado
El Real Valladolid tuvo que agotar en Montilivi dos ventanas de sustituciones por lesiones y desplegó su segunda unidad con un plan de partido alterado.
Con el enfado por el penalti no señalado sobre Gonzalo Plata aún latente, el Real Valladolid ha completado este sábado su habitual sesión de recuperación post-partido, a la que no saltaron los tres cambios producidos por lesión en Montilivi. Si bien Pacheta viajó a Girona con todos los futbolistas en buenas condiciones (que no óptimas), los avatares del destino y lances del juego quisieron que el choque estuviera condicionado por los problemas físicos.
Apenas habían transcurrido un par de minutos cuando Sergi Guardiola recibió un golpe en la cadera izquierda, que, como reconoció posteriormente Pacheta en los micrófonos de DAZN, “no le dejaba moverse”. No en vano, después de recibir una primera atención intentó reintegrarse al juego, aunque el golpe le impidió seguir y provocó la tempranera entrada de Shon Weissman, con quien el técnico tomó algún riesgo.
Antes de la media hora sería Luis Pérez, único futbolista que lo había disputado todo, el que obligó a una segunda sustitución. Después de realizar un repliegue defensivo en zonas interiores, notó un latigazo que pronto apercibió a sus compañeros de la necesidad de la permuta, pues enseguida Joaquín hizo gestos al banquillo para que lo sustituyeran. Al andaluz, consciente de que seguramente tendrá que parar, luego se le vio emocionado.
Sus problemas musculares no fueron la última alteración sufrida en el primer tiempo, ya que Anuar, que había visto la amarilla a los nueve minutos, fue apercibido en otra falta por el colegiado, un riesgo de expulsión que llevó a realizar otra permuta, en este caso, en el descanso. Por el momento en el que se produjo, no agotó las ventanas, pero sin lugar a dudas condicionó de cara al segundo tiempo, en el cual el Girona dispuso de tres cambios más.
En el tramo final, cuando el envite encaraba prácticamente el último cuarto de hora, Kike Pérez sintió una molestia en la pierna derecha, en la zona del aductor, que llevó a dar entrada a Aguado e hizo que el debut de Kenedy fuera, al menos en apariencia, el único cambio ‘natural’ de un partido condicionado por el penalti no cobrado a Plata, pero también cuyo plan se vio alterado por estos accidentes, mermantes para la pizarra de Pacheta.