Suspensos del Pucela: La soledad de Raúl Moro

El Real Valladolid vuelve a cuajar en Getafe un pésimo encuentro y suma su cuarta jornada sin ganar ante un rival directo, que no necesitó de mucho para imponerse a un conjunto sin reacción. Raúl Moro fue el único que conjugó voluntad y acierto, pero con él solo no basta.

Hein: Se hizo daño en la mandíbula al salir a un balón aéreo que pareció generarle dudas. Sacó bien abajo lo que pudo ser el tercer tanto getafense.

Luis Pérez: No se dejó ver como otras veces en ataque, a pesar de que el dibujo podía proyectarle. Cometió una pérdida grave que casi termina en penalti.

Juma: Buscó el emparejamiento con Uche, rutilante en lo físico. Dio sensación de dominio de escenario en medio de un contexto duro.

Javi Sánchez: Estuvo fallón en el pase, dentro de lo poquito que quiso el cuero el equipo. Sigue sin ser el de otros tiempos, y si él no tira de la defensa...

Cenk: Expeditivo, completó seis despejes en el primer tiempo, además de bloquear un disparo que iba con dirección a puerta. En cambio, no llegó a tapar el de Álvaro Rodríguez.

Lucas Rosa: Tuvo un inicio prometedor, pero apenas intervino en ataque, más que en un cambio de orientación con dirección a Moro. Se come el envío directo sobre Álvaro Rodríguez que acaba en gol.

Raúl Moro: El equipo buscó progresar a partir de su velocidad. En dos así, habilitó bien a Sylla, que no pudo embocar. Tampoco pudo hacerlo Juric cuando centró bien al segundo palo.

Juric: Cometió seis pérdidas y dio solamente tres pases buenos en la primera mitad, señal de lo poquito que quiso y pudo hacer el Pucela con balón. No llegó a rematar el buen servicio de Moro.

Kike Pérez: Dio vida al Getafe al cometer varias faltas consecutivas en el primer periodo. Disparó flojo abajo una falta antes del descanso. Bregó y sumó 21 acciones defensivas de valor.

Anuar: Corrió mucho, pero no acabó de impactar porque cumplió una doble función de refuerzo en el centro del campo, y no solo de jugador de banda. Ganó duelos, pero sirvió de poco.

Sylla: Envió, a bocajarro, un remate fuera en posición peligrosa, aunque en fuera de juego. Soria evitó su remate superada la media hora. Se le impusieron siempre en las disputas.

También jugaron en el conjunto de Paulo Pezzolano:

Mario Martín: Entró completamente superado. Devuelve dentro del campo un balón que se marchaba fuera de manera incomprensible en la acción del 2-0.

Latasa: Se durmió dentro del área delante Carles Pérez en la jugada del 2-0. Tocó el balón diez veces y tres fueron pérdidas.

Iván Sánchez: El equipo no tuvo ni un solo atisbo de reacción, aunque él lo intentó.

Marcos André: Dice mucho que en 20 minutos sobre el campo solo tocase el balón tres veces.

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