Sow, una apuesta por confirmar

Djibril Sow se ha visto obligado a poner punto y final antes de tiempo a su primera temporada como jugador del Sevilla. El jugador suizo se lesionó tras el partido ante el Getafe durante una sesión de entrenamiento. La mala fortuna hizo que se rompiese el quinto metatarsiano de su pie izquierdo y, como apuntaban todo los pronósticos, no volverá a jugar esta campaña. El suizo ha sido intervenido con éxito en Madrid en el Hospital Ruber Internacional y el pronóstico de recuperación que ha comunicado el club es de ocho a diez semanas de baja. Es decir, no estará disponible hasta mediados de junio o principios de julio, por lo que su presencia en la Eurocopa con su selección es casi improbable. En el mejor de los casos, estaría disponible ya empezada la fase de grupos. Por otro lado, debería llegar sin problemas al inicio de la próxima pretemporada ya recuperado.

La primera campaña de Sow ha quedado marcada por las lesiones y las molestias musculares que han lastrado su presencia y su potencial en Nervión. Víctor Orta apostó fuerte por el suizo el pasado mes de agosto al pagar 10 millones de euros más otros tres en variables al Eintracht Frankfurt. Una de las dos grandes inversiones del nuevo director deportivo junto a Dodi Lukebakio, por el que pagó una cantidad similar. Llegó para dotar a la medular de Mendilibar, por aquel entonces, de físico y recorrido como un jugador que puede tener cualquier rol en el centro del campo, tanto defensivo como ofensivo. De hecho, con la selección de Suiza actúa normalmente como mediapunta. Una demarcación en la que no se le ha visto apenas en el Sánchez-Pizjuán por las presencias de Rakitic, Óliver Torres o Suso.

Pero su primera temporada en el Sevilla solo ha dejado destellos de su mejor versión en la Bundesliga o con Suiza. Entre sus últimas dos temporadas marcó siete goles y dio seis asistencias. Este año tan solo una diana y dos pases de gol. Durante parte de la primera mitad de la campaña arrastró varios problemas en el tendón de aquiles que le lastraron e incluso llegó a jugar lesionado para ayudar al Sevilla que pasaba por un momento crítico deportivo y de lesiones en el plantel: “Desde noviembre hasta finales de enero he estado jugando con dolor en el tendón de Aquiles. Tuve que tirar hacia adelante, pero estoy feliz por haberlo hecho porque el equipo estaba mal”.

Además de ello, antes de la actual rotura, también arrastró problemas en la cadera que le privaron de jugar varios encuentros en las últimas semanas. Por lo que la primera gran apuesta de Víctor Orta queda a la espera de la próxima temporada, donde tendrá que dar un importante paso al frente para devolver la confianza al club en un año de reconstrucción. En el centro del campo, respecto a la pasada campaña, pocos jugadores se mantendrán de la actual plantilla. Óliver, Soumaré, Hannibal y Agoumé, en principio, no continuarán, sumado a las posibles salidas de jugadores que han perdido galones como Suso o Joan Jordán en el presente curso. El helvético está llamado a dar un paso al frente en la 2024-25 y convertirse en uno de los pilares del próximo Sevilla que se encuentra en fase de regeneración.